Castigado por su amor romance Capítulo 532

Yasmine miró con arrogancia a la atrapada Sabrina: "¡P*rra! ¡Por fin vas a ser castigada por tus malas acciones! ¡Dudo que pensaras que el Joven Amo Sebastian se encargaría personalmente de ti y te cortaría la mano que usas para sostener tu bolsa! ¡Te lo mereces! Ah... Tú... ¿Qué estás haciendo? ¿Por qué me agarras? ¡Suéltame! ¡Déjame ir! Joven Amo... Usted... ¿Por qué me agarra su subordinado?".

Yasmine sintió que no había hecho nada malo.

Ella había estado siguiendo obedientemente a Sebastian, y Sebastian la había estado admirando. No dejaba de mirarla.

Yasmine forcejeo mientras miraba a Sebastian con una expresión horrorizada: "Joven Amo, sálveme...".

"¡Muy ruidosa!". Sebastian miró a Yasmine con indiferencia antes de decirle a Kingston: "Rompe la mano que usó para sostener la bolsa y luego córtala. Después, tira el resto en una fosa séptica".

"¡Sí, Joven Amo!", respondió Kingston antes de arrastrar a Yasmine fuera del salón.

El acto dejó sorprendidos a todos los presentes.

Las mujeres del salón de banquetes estaban muy sorprendidas y miraban la escena con los ojos muy abiertos.

Los reporteros habían apagado sus cámaras y desconectado sus micrófonos.

Este tipo de noticias no era ninguna broma.

El brazo de una noble dama iba a ser cortado. Ese tipo de noticia definitivamente sería explosiva, pero ¿quién se atrevería a exponerla?

¿Quién se atrevería?

Solo se atrevieron a mirar la escena con una expresión de incredulidad.

"Joven Amo, piedad, yo... ¿Qué hice mal? ¿Podría decírmelo, por favor? No... No me corte la mano, no me mate, Joven Amo...", grito Yasmine con agonía.

Por otro lado, Sebastian la ignoró.

Miró a Sabrina mientras caminaba hacia ella.

"Primo...". Nigel dio un paso adelante y se puso delante de Sabrina: "Primo, estoy dispuesto a ser castigado en lugar de Sabrina. Córtame la mano, arrójame a la fosa séptica, puedes hacerlo. Primo... Ya que Sabrina dio a luz a tu hija, ¡por favor, perdónala!".

"¡Joven Amo Sebastian! Yo, Marcus Shaw, estoy dispuesto a entregarle todos mis bienes. Por favor, perdone a Sabrina".

Sabrina caminó hacia Sebastian.

Todos contuvieron la respiración.

Nigel y Marcus abrieron la boca, temiendo que Sebastian enviara lejos a Sabrina en el siguiente segundo.

Sabrina caminó hacia Sebastian. Sebastian le pellizcó la barbilla, y le dijo, aparentemente reprendiéndola: "¡Solo estuve fuera tres días! ¡Tres días! ¡De alguna manera te las arreglaste para crear una situación tan difícil para ti! Incluso Aino, de cinco años, estuvo mejor que tú".

Sabrina se quedó sin palabras.

"Te las arreglaste para que alguien te quitara la bolsa. ¿Qué estabas haciendo?". Sebastian la atrajo hacia su abrazo, con su mano sosteniendo la parte posterior de su cabeza, haciendo que ella lo mirara mientras le preguntaba: "¡¿No puedes cuidar de ti misma, eh?!".

Sabrina respondió: "¡Sí!".

"Si puedes cuidar de ti misma, ¿por qué estabas en una situación tan terrible? Parecías una rata de la calle a la que le habían dado una paliza".

Sabrina no sabía qué decir.