Castigado por su amor romance Capítulo 558

Sabrina estaba profundamente dormida en los brazos de Sebastián esa noche y descansaba dulcemente y sin pesadillas. Sin embargo, muy lejos, en Ciudad Kidon, Selene no dejo de llorar durante toda la noche.

Lloraba tanto que su voz se había vuelto ronca, sus ojos estaban rojos e hinchados y sus ojeras eran profundas y abultadas. Cuando el médico llegó para revisar al Viejo Amo Shaw por la mañana, miró a Selene y creyó ver un fantasma.

Una de las empleadas del hospital estaba tan aterrada que casi rompe en llanto al ver a Selene.

La mirada de Selene estaba aturdida y vacía.

Después de examinar al Viejo Amo Shaw, el médico le dijo que se había recuperado por completo y salió de la sala. Selene se puso delante del Viejo Amo Shaw en ese momento.

"Abuelo...". Su voz estaba ronca.

El Viejo Amo Shaw sintió como si un cuchillo le hubiera atravesado el corazón al ver a su nieta así. Su voz envejeció en un instante: "¡Selene, mi buena nieta! Siempre te lo he dicho. Debes estar tranquila, mantener la calma, incluso ante cualquier adversidad. ¿Por qué no escuchás el consejo de tu abuelo?".

"Mírate. Te has torturado así toda la noche. ¿Y si Sebastian te viera así? No tendrías ninguna posibilidad de casarte con él en el futuro".

Selena miró a su abuelo con los ojos y la cara hinchados: "Abuelo, Sebastian ya está casado con Sabrina. ¿Qué otra oportunidad podría tener? Tienen una hija juntos, abuelo. No es que no supieras lo malvada que es Sabrina. Ella se ha quedado con mi familia desde que era una adolescente. Mis padres la querían mucho, pero ella trataba de competir conmigo y peleaba conmigo por todo. Todo lo que yo tenía, ella también lo quería".

"Ella nunca había pensado en sí misma como una chica adoptada".

"Lo único que sabía era competir conmigo".

"¡Estaba especialmente celosa! ¡Celosa de todo lo que yo tenía!".

"Sabrina no necesariamente amaba a Sebastian. ¿Qué amor podían compartir?".

"Fue porque Sebastian era mi prometido, así que ella debía tenerlo”.

"Desde pequeña, juraba que su vida debía ser 10.000 veces mejor que la mía".

"¡Abuelo, Sabrina estaba loca!".

Una oleada de furia creció en el pecho del Viejo Amo Shaw cuando vio a Selene llorar.