Castigado por su amor romance Capítulo 655

Sabrina, por su lado, miraba todo esto con calma.

Era realmente espantoso, es cierto.

"Mamá, mamá, ¿qué fue lo que hiciste para que estos dos se pelearan?", preguntó Aino.

Kingston no esperó que Sabrina respondiera y dijo: "El truco que usó tu madre se llama...".

En un principio, Kingston quería decir la expresión "meter cizaña entre dos personas", pero temía que esto pudiera darle un mal ejemplo a la niña. Por eso, cambió sus palabras y dijo: "... Se llama echar leña al fuego".

"Mamá, tu truco de echar leña al fuego fue realmente útil. Los dos empezaron a pelearse". Aino juntos sus palmas mientras sonreía mirando a su madre.

Tanto Yvonne como Ruth también se rieron alegremente.

Ryan, que estaba a un lado, dijo: "Ustedes tres mujercitas uniendo fuerzas realmente se han vuelto invencibles. Sabrina es tranquila e ingeniosa, así que podría ser el cerebro. Yvonne tenía una lengua afilada, y tú...".

Ruth sonrió avergonzada: "¿Y yo?".

Ryan sonrió y dijo: "Lo que más me gustó fue ver a mi fierecilla en acción, sobre todo su mirada, también que aprendió a ser educada, lo que la hacía parecer más sincera".

Ryan sabía realmente cómo conquistar a una jovencita. Ruth siempre había sido consciente de esto. Sin embargo, en ese momento, ella seguía estando muy contenta de escucharlo hablar así.

"Todavía falta otro buen espectáculo", volvió a decir Ryan.

"¿Qué pasó? ¿También querías unirte a Selene y ayudar a Mindy?", preguntó inmediatamente Ruth con una mirada seria.

Ryan preguntó a propósito: "A juzgar por el significado de tus palabras, ¿pensabas estar del mismo lado que Sabrina y trabajar juntas para enfrentarte a tu prima y a Selene también?".

Por un momento, la admiró profundamente en su corazón.

Ryan sonrió y dijo: "No te preocupes. Hoy ustedes tres serán las dueñas de este banquete".

Después de decir esto, se puso al frente de Lincoln y Jade y dijo con desdén. "¡Ustedes dos! ¿No les da vergüenza pelearse así frente a la entrada de la residencia de la familia Ford?".

Fue entonces que Jade se dio cuenta que había sido engañada por Sabrina una vez más.

Sabrina se encogió de hombros ante Jade, viéndose muy inocente.

Entonces, sonó una potente voz que los regañaba desde el interior de la antigua residencia de los Ford: "¿Qué está pasando? ¿Qué está pasando?".