Consentida por el Presidente: Mi esposa es un poco dulce romance Capítulo 1019

Sin embargo, él nunca había visto el nombre “Shawn Charrington” en la lista de invitados. Mientras pensaba en esto, el rostro de Liam se ensombreció.

“Nunca había visto este nombre”.

Una vez que pronunció esas palabras, la Señora Alfuth fue tomada con la guardia baja.

“Como puede ser…”.

Justo en ese momento, el Tío Ian parecía haber pensado en algo. Él dijo: “Si no me lo hubieras dicho antes, no lo hubiera notado. Ahora que lo pienso, parece que no he visto a Shawn hoy”.

En ese punto, la verdad era muy clara.

Gregory dijo solemnemente: “Me temo que tendré que molestar a la Señora Alfuth para que contacte a su sobrino”.

La Señora Alfuth asintió instantáneamente.

“Claro, le haré una llamada ahora mismo”.

Mientras ella lo decía, sacó su celular para llamar a Shawn.

Sin embargo, cuando se marcó el número, se escuchó un tono de llamada que significaba que el teléfono del receptor estaba apagado.

La pareja se quedó estupefacta en ese momento.

“¿Cómo puede apagar su teléfono? No te preocupes, lo volveré a llamar”.

Mientras los tranquilizaba, la Señora Alfuth le hizo varias llamadas a Shawn.

Sin importar cuántas veces marcó su número de celular, el celular de la otra persona permaneció apagado.

En ese momento, incluso la Señora Alfuth comenzó a sentir pánico.

Al ver a la Señora Alfuth intentando llamarlo de nuevo, Nell dio un paso adelante y le tomó la mano.

“No hay necesidad de llamarlo más”.

Ella se dio la vuelta para mirar a Liam. “Él puede que se haya escapado o se haya metido en problemas. El Jade Arcano acaba de ser robado y él se ha ido. No hay tal coincidencia en el mundo. Liam, tienes conexiones con gente aquí y también estás familiarizado con el área. Envía a alguien para que lo localice”.

Liam asintió con la cabeza estando de acuerdo. El Tío Ian agregó rápidamente: “Te diré varias localizaciones que él suele frecuentar. Puedes enviar a alguien a esos lugares primero”.

Más tarde, los dos caminaron hasta una esquina para hacer una llamada.

Por este lado, Nell lo sintió un poco insoportable al ver a la Señora Alfuth pálida y ansiosa.

A pesar de que no estaba claro si el jade había sido tomado por Shawn, pero a juzgar por la evidencia y la situación actual, parecía correcto que Shawn fuera el culpable.

Además, él era el único que tenía la llave de la casa, y ahora está desaparecido.

Los Alfuth no tenían hijos, por lo que trataron a Shawn como a su propio hijo biológico. Uno podría imaginar lo tristes que estarían si se enteraran de que Shawn los estaba traicionando.

Nell suspiró y se acercó para consolar a la Señora Alfuth. “Señora Alfuth, no te preocupes demasiado. Podría ser un malentendido. Sin importar que, busquémoslo primero antes de dar el siguiente paso”.

La Señora Alfuth asintió estando de acuerdo.

Muy pronto, Liam ya había hecho arreglos para que la gente buscara a Shawn.

La Señora Alfuth llevó a todos a la sala de estar para que tomaran asiento e hizo que sus criadas les sirvieran té.

Al darse cuenta de que no se veía bien, el Tío Ian le dijo con preocupación: “Estoy aquí. Puedes tomarte un descanso de esto. Ve a descansar en tu habitación. Iré arriba y te avisaré si hay alguna noticia”.

La Señora Alfuth negó con la cabeza.

“Con esto sucediendo, ¿cómo puedo quedarme dormida?”.

Ella miró al Tío Ian con impaciencia y le preguntó: “¿Qué dices? ¿El jade fue tomado por Shawn?”.

Incapaz de soportar la verdad, el Tío Ian frunció el ceño.

Eventualmente, él negó con la cabeza.

“Creo que no fue él. Pero necesitamos localizarlo antes de que podamos estar seguros”.

Sólo entonces la Señora Alfuth asintió con la cabeza.

Las personas que Liam había enviado para localizar a Shawn eran eficientes. No pasó mucho tiempo antes de que encontraran a la persona correcta.

Lo único fue que cuando trajeron a Shawn de regreso, él se veía particularmente patético como un ratón ahogado. Ya no tenía ese aspecto agradable que solía tener antes.