Consentida por el Presidente: Mi esposa es un poco dulce romance Capítulo 335

Janet lloró.

Sus lágrimas eran como un hilo de cuentas roto que rodaba por sus mejillas.

Se sentía como si hubiera un gran peso en su corazón. Tenía una sensación de inquietud en el pecho y una sensación indescriptible se extendió por ella, lo que provocó el temblor de su cuerpo.

Liam suspiró y la abrazó.

Los sollozos de Janet se hicieron más intensos. Ella tiró de su camisa y enterró su rostro en sus brazos mientras lloraba como una niña.

Habían pasado cinco años. Pasaron cuatro años separados y tuvieron una noche salvaje hace un año. Más tarde, dio a luz a Sunny.

Estaba cansada de todas las disputas y enredos con Liam.

Quería dejarlo todo. Hasta ese momento, solo quería ir a algún lugar lejano con su hijo y vivir una vida tranquila. Ella se negó a volver a involucrarse en asuntos amorosos.

Por esto, incluso renunció a su identidad como la Señorita Mayor de la familia Hancock y al amor de su padre.

Sin embargo, Liam mencionó esa solicitud en ese momento.

¿Tenía otras intenciones?

¿Quería evitar que ella viviera una buena vida recompensándola después de lastimarla, para que ella no pudiera perder por completo la esperanza en él? Era como si ella fuera el pez y él fuera el pescador que tenía su anzuelo sobre ella.

¿Sobre qué motivos quería que ella aceptara su solicitud?

¿Era solo porque todavía sentía algo por ella?

Janet lloró fuerte y lastimosamente. Ella comenzó a golpearlo con los puños.

En lugar de tomar represalias, Liam se quedó quieto y permitió que ella lo golpeara.

Después de un largo rato, Janet se cansó de llorar y las lágrimas dejaron de fluir.

Estaba a punto de separarse de sus brazos cuando el hombre le puso una mano detrás de la cabeza y le plantó un beso en los labios.

El corazón de Janet dio un vuelco cuando agarró su camisa con fuerza. Sintió como si se hubiera convertido en papilla.

Pasó algún tiempo antes de que Liam la dejara ir. Sacó su teléfono e hizo una llamada.

“Chet, prepara el coche y también los documentos necesarios para el registro de matrimonio. Entonces, espérame abajo...".

Janet estaba desconcertada. Antes de que pudiera reaccionar, el hombre dio sus órdenes y colgó.

Ella le preguntó nerviosamente: "¿Qué estás haciendo?".

Liam guardó su teléfono y la miró con seriedad.

"Jan, ¿quieres casarte conmigo?".

Janet se quedó sin palabras.

"Ignoraremos otros asuntos y nos casaremos de inmediato, ¿de acuerdo? Siempre hemos tenido a nuestras familias y esos enredos en el pasado para considerar, es por eso que no hubo un resultado positivo para nosotros y nos cansamos. Ahora somos adultos y Sunny necesita una familia adecuada. Entonces, no pensemos demasiado. Una vez que nos casemos, todos los problemas estarán resueltos. ¿Estás de acuerdo?".

Janet estaba atónita. Le tomó algún tiempo antes de negar con la cabeza.

"No, no".

"¿Por qué no?".

La expresión de ella cambió sutilmente y su corazón se hundió.

“Liam Jackman, ¿por qué me propones matrimonio ahora? No me digas que es porque me amas. No me lo creo".

La expresión de Liam también se hundió.

La miró fijamente y la pizca de resentimiento en su mirada comenzó a reaparecer. Aun así, hizo todo lo posible por suprimirlo y le preguntó: "¿Cuál crees que es la razón, entonces?".

Janet apretó los labios y permaneció en silencio.

De repente, Liam se rio.

Extendió la mano para acariciar su rostro y le dijo con voz tranquila y profunda: “Jan, me lastimaste hace cinco años, así que te abandoné durante cuatro años como un acto de venganza. Esa noche, hace un año, viniste a buscarme voluntariamente. ¿Vas a lastimarme y abandonarme de nuevo hoy?

Janet se estremeció.

Apretó los puños y sus uñas se clavaron profundamente en su palma, causando una sensación desagradable.

Inmediatamente, la mirada de Liam se volvió dura cuando la miró.

“Pero hoy, ya no soy la misma persona de hace cinco años, así que no te permitiré que te vayas. Pase lo que pase, debes casarte conmigo, ¿entendido?

Janet abrió la boca y quiso decir algo, pero se rindió.