Consentida por el Presidente: Mi esposa es un poco dulce romance Capítulo 865

Con ese pensamiento, Vickie se sintió aliviada.

Sin embargo, todavía se sentía un poco inquieta esa noche mientras dormía.

No sabía por qué, pero su pecho se sentía bastante incómodo, como si una piedra estuviera presionando su corazón y le diera ganas de vomitar.

Vickie se despertó en medio de la noche.

Hubo sonidos de pasos apresurados afuera, así que salió de la cama y corrió hacia la ventana para echar un vistazo.

Todo lo que vio fueron coches y gente corriendo afuera. Todos tenían prisa y estaban confundidos.

Vickie tenía un mal presentimiento en su corazón y miró la hora. Era poco antes de las 3:00 a.m.

Casi al mismo tiempo que escuchó el ruido, Andrea también llegó corriendo desde afuera.

Andrea todavía estaba usando su pijama y solo tenía un cárdigan delgado como capa exterior.

Al ver que Vickie estaba en la ventana, ella dijo con urgencia: “Señorita Vickie, ¿cómo estás? ¿Estás bien?”.

Vickie se volteó y la miró con el ceño ligeramente fruncido. “¿Qué está sucediendo ahí afuera?”.

Andrea respondió: “No lo sé. ¡Dijeron que alguien lanzó una bomba en la ciudad y que estamos a punto de ir a la guerra!”.

Vickie se sobresaltó.

¿Una guerra?

¿Cómo era eso posible?

Todos sabían que este lado era territorio de Gregory Graham. Aunque el Regimiento Dragón había estado en declive en los últimos dos años, no estaba en tan malas condiciones como para que otros se movieran directamente sobre ellos.

Con el ceño fruncido, Vickie preguntó: “¿Dónde está Gregory?”.

Andrea parecía tan ansiosa que estaba a punto de llorar. Ella estaba temblando cuando dijo: “Estaba a punto de decírtelo. Me acaban de despertar y fue entonces cuando escuché que el Joven Amo había regresado y estaba gravemente herido, así que me apresuré a buscarte”.

Vickie estaba terriblemente conmocionada.

Ella dijo con voz profunda: “¿Él está herido? ¿En qué momento sucedió?”.

“No lo sé. Me acabo de enterar”.

“¿Dónde está?”.

“Lo han enviado de regreso”.

Tan pronto como Andrea terminó de hablar, la mujer que todavía estaba frente a ella hace un segundo ya había salido corriendo.

Andrea estaba tan sorprendida que gritó: “¡Señorita Vickie! Tu herida en la pierna…”.

¿Cómo podría importarle a Vickie su propia herida?

Su cabeza estaba llena de la escena en la que Gregory resultaba herido.

¿Estaba gravemente herido?

¿Cómo era eso posible?

¿No tenía guardias? ¿Quién le haría esto tan pronto?

Su corazón latía con fuerza y ​​no tardó en subir corriendo las escaleras del complejo principal.

Solo en ese momento descubrió que el segundo piso estaba lleno de personas que no solo eran los sirvientes, Harold y los demás, sino que incluso Massimo Nolan había llegado y todos estaban reunidos alrededor de la puerta del dormitorio.

Su rostro cambió mientras rápidamente se acercó.

“¿Dónde está?”.

Cuando Harold la vio, respondió respetuosamente: “Está en el dormitorio”.

Vickie quería entrar, pero Massimo la detuvo.

Él la miró con ojos preocupados y dijo: “Gregory resultó herido por una bomba. La otra parte vino preparada, por lo que esta vez está gravemente herido. No te preocupes demasiado, ya que hemos encontrado al mejor doctor para operarlo. Como no es seguro ir al hospital en este momento, conseguimos que alguien instalara el quirófano dentro temporalmente. Además del doctor, el Tío Osborne está allí para cuidarlo. No entres en pánico todavía. Si quieres entrar, entonces cámbiate primero”.

Como explicó Massimo, le pidió a alguien que le trajera un conjunto de equipo protector esterilizado.

Sin pensarlo, Vickie simplemente se lo puso en el cuerpo.

Después de ponerse el traje protector, ella se volteó hacia Massimo. “¿Está bien ahora?”.

Massimo asintió.

Vickie volteó la cabeza y le preguntó al Señor Osborne en voz baja: “¿Qué dijo el doctor hace un momento?”.

Sabía que el doctor habría dicho algo.

El Señor Osborne dijo en voz baja: “No lastimó ningún órgano vital, pero la cirugía aún no es fácil y todo solo se puede determinar después de la operación”.

Vickie asintió con la cabeza.

Con eso, ella respiró hondo y miró por un rato más antes de retirarse en silencio.

Todos todavía estaban haciendo guardia afuera.

Cuando la vieron salir de la habitación, se adelantaron ansiosamente y le preguntaron por el estado de Gregory.

Vickie no respondió, pero miró a Harold y dijo con voz profunda: “¿Qué ocurrió hoy?”.

Harold tampoco se veía muy bien.

Después de todo, Gregory había salido con él y sus escoltas.

Sin embargo, él y los miembros de su equipo estaban bien, pero Gregory resultó gravemente herido, lo que no podía justificarse.

Por lo tanto, él se sintió horrible en ese momento.

Se sentía peor que la metralla que estaba pegada a su cuerpo.

Sin embargo, Harold todavía respondió a la pregunta de Vickie.

Había demasiada gente allí, por lo que no era muy conveniente hablar. Él dijo con voz solemne: “Señorita Thomas, por favor, hablemos allá”.

Después de decir eso, la llevó al otro extremo del pasillo.

Vickie no dijo nada y solo lo siguió.

Cuando llegaron al final del pasillo, Harold se detuvo, se dio la vuelta y dijo en voz baja: “Fuimos emboscados”.

Vickie frunció el ceño y preguntó: “¿Qué quieres decir?”.

Harold continuó: “Hoy, se suponía que el Joven Amo me llevaría con él a la ciudad cercana para discutir un trato comercial. Ya que terminó demasiado tarde y no era conveniente regresar esta noche, planeamos regresar mañana por la mañana”.