Consentida por el Presidente: Mi esposa es un poco dulce romance Capítulo 876

Los ojos del hombre se iluminaron cuando miró a Vickie. “¿Masajear dónde? ¿Mi cuerpo? ¿Me vas a dar un masaje?”.

Su brillante sonrisa se oscureció de inmediato y se burló. “Sigue soñando. ¡Masajéate tú mismo!”.

Luego, se levantó y salió furiosa.

Gregory realmente no esperaba que ella se enojara. Él ni siquiera se dio cuenta de lo que insinuaban sus palabras.

Solo se le ocurrió que había dicho algo mal cuando volvió a sus sentidos, y la mujer ya había caminado a la puerta. Rápidamente se corrigió a sí mismo, “Oye, eso no es lo que quise decir. No lo malinterpretes. Yo…”.

“No me importa lo que quisiste decir”. Vickie se dio la vuelta y dijo agresivamente: “Te lo digo, será mejor que dejes a un lado esos pensamientos sucios que tienes de mí, o de lo contrario… ¡Hmph!”.

Levantó su pequeño puño e hizo un gesto amenazador antes de salir.

Gregory se sintió muy ofendido. Extremadamente ofendido.

Él estaba sentado allí, sintiendo que claramente no había hecho nada. Todo había sido mencionado por la propia mujer, entonces, ¿él cómo se convirtió al final en el villano?

Suspiró impotentemente. El corazón de una mujer realmente era tan voluble como el clima cambiante. No tenía sentido adivinar los pensamientos de una mujer porque, por mucho que lo intentaras, nunca entenderías en qué estaba pensando.

Esas palabras de sabiduría nunca estuvieron equivocadas.

Él se volteó y miró el aceite esencial que dejó Vickie y lo recogió para escudriñarlo.

La imagen de cierta mujercita usándola para masajearlo a él le vino a la mente, y sus labios no pudieron evitar extenderse en una sonrisa.

Hmm… Bueno, realmente no sonaba como una mala idea si ella estaba dispuesta a hacerlo.

En el otro lado, Vickie se fue exasperada y solo redujo la velocidad después de llegar a las escaleras.

Ella en realidad no estaba enojada, sino que acababa de decir que lo estaba. Realmente no sabía cómo lidiar con Gregory actuando como un coqueteo en el estado mental actual de ella.

Ella ya entendía que tenía que apreciar a la persona que tenía frente a ella y no preocuparse demasiado por lo que había sucedido en el pasado.

Sin embargo, entender algo era una cosa, pero era otra cuestión si realmente podía hacerlo o no.

No había forma de que ella olvidara o ignorara por completo lo que había sucedido en el pasado. Naturalmente, no había forma de simplemente renovar su relación con él como si nada hubiera pasado.

En comparación con ese tipo de relación, Vickie sintió que prefería más la actual.

Ellos no eran pegajosos como una pareja, sino más bien como camaradas y amigos, el socio más confiable a quien cada uno podía dar la espalda.

Ella siempre había sentido que tener a alguien así en este mundo era algo afortunado.

En cuanto al resto, todavía no quería pensar en ello. Ella tomaría todo paso a paso y cruzaría ese puente cuando llegara.

Con ese pensamiento, se relajó y bajó las escaleras con pasos rápidos.

Abajo, Andrea estaba charlando con una criada que estaba limpiando un jarrón. Al verla bajar, saludó rápidamente a Vickie y se acercó trotando con una sonrisa. “Hermana Vickie, estás aquí”.

Vickie asintió con un “hmm”.

Dado que la botella de aceite esencial ya había sido probada para asegurarse de que no hubiera ningún problema con ella, Vickie se dio cuenta de que lo estaba pensando demasiado.

Era sorprendente que sospechara que Andrea manipuló la botella de aceite esencial solo porque se había quedado dormida dos veces. Sin embargo, ahora eran tiempos difíciles, por lo que no había nada de malo en que ella fuera cautelosa.