Consentida por el Presidente: Mi esposa es un poco dulce romance Capítulo 945

“¡Excelente! ¡Gran técnica!”.

Nell y los demás también aplaudieron. Incluso Gregory, a quien no le agradaba el viejo, hizo lo mismo.

Gideon se acercó al Abuelo Brooks y le dijo: “¡Siempre supe que tenías experiencia en el negocio de las antigüedades, pero no sabía que tus habilidades con la espada eran tan buenas!”.

El Abuelo Brooks, que estaba en su atuendo de práctica, miró a Gideon y le preguntó: “¿Quieres intentarlo?”.

Todos se quedaron sorprendidos, pero Gideon no se sorprendió. Él simplemente sonrió y dijo: “Claro”.

El Abuelo Brooks luego arrojó la espada en su mano a Gideon y tomó otra para él mismo. De pie en una postura preparada, se burló.

“Joven, esta es una espada de verdad. La hoja es afilada y no muestra piedad, así que si te corta en cualquier parte, no puedes hacerme responsable”.

Con una sonrisa, Gideon respondió: “Aunque eres bueno con la espada, todavía eres viejo. No te cortaré, pero si accidentalmente te rompes la espalda, tampoco me puedes hacer responsable”.

Tan pronto como el Abuelo Brooks escuchó esto, su rostro se ensombreció de inmediato.

En el momento en que levantó su espada, él atacó a Gideon.

Los dos hombres inmediatamente se vieron envueltos en una pelea.

Nell y Gregory estaban de pie a un lado, mirando con inquietud. No esperaban verlos a los dos pelear en un abrir y cerrar de ojos cuando estaban bien hace un momento.

Aunque era solo una sesión de entrenamiento, fue con una espada real. Gideon había estado sentado en su oficina durante años, preocupándose por problemas comerciales. Además, ninguno de ellos había visto esta técnica antes, entonces, ¿y si realmente se lastimaba?

El corazón de Nell se le subió a la garganta y tenía las manos apretadas con fuerza. Estaba tan ansiosa que sus palmas sudaban profusamente.

Por otro lado, Gideon estaba muy tranquilo y sereno.

El Abuelo Brooks era realmente genial, pero nadie sabía que las habilidades con la espada de Gideon tampoco eran malas.

Esto se debió a que hace muchos años, cuando estaba aburrido, vio lo bueno que era un maestro aislado con una espada y por eso siguió su ejemplo por capricho.

Inesperadamente, estaba tan enganchado que continuó aprendiendo durante varios años.

Aunque no había practicado por muchos años, tenía una buena experiencia en artes marciales y su memoria también era mejor que la de la mayoría. En unos pocos movimientos, Gideon pudo recordar su técnica y luchó con el Abuelo Brooks al mismo nivel.

Los dos lucharon entre ellos por unos treinta movimientos.

Después de todo, el Abuelo Brooks era viejo y gradualmente se fue agotando.

Él tampoco esperaba que Gideon fuera tan poderoso. Su rostro estaba tenso como si tuviera que terminar la pelea y determinar un ganador sin importar qué.

Sin embargo, a Nell le preocupaba que los dos pudieran resultar heridos. Después de todo, todavía tenían que preguntarle al Abuelo Brooks por el paradero del Jade Arcano, por lo que no sería bueno si alguno de los dos saliera herido.

Así, cuando ya casi era la hora, ella gritó: “Deténganse cuando puedan”.

Tan pronto como ella dijo esto, Gideon refrenó la espada del Abuelo Brooks con un hermoso movimiento rápido, luego colocó su espada sobre el cuello del viejo.

El Abuelo Brooks había perdido.

El rostro del viejo estaba muy sombrío mientras que con una sonrisa, Gideon retrocedió, tomó la espada de vuelta y se inclinó.

“Abuelo Brooks, buen encuentro”.

El viejo lo fulminó con la mirada. Luego resopló antes de tomar su espada y entró.

El grupo lo siguió apresuradamente al interior.

Como Gideon estaba ejercitándose, estaba sudando tanto que Nell sacó un pañuelo para que se limpiara el sudor. Los cuatro no eran extraños, por lo que se sentaron en las sillas de la sala de estar y esperaron al Abuelo Brooks.

Después de unos 10 minutos, salió el Abuelo Brooks.

Él se había cambiado y ahora vestía un traje Tang blanco. Este estilo hizo que el viejo delgado pareciera un maestro experimentado.

Los ojos del viejo estaban fríos cuando dijo: “¿Qué? ¿Quieres pegarme? ¡Te reto a que lo intentes!”.

Gideon rápidamente levantó la mano para detener a Gregory y le frunció el ceño con desaprobación.

“Gregory, no eres una persona impulsiva. No te dejes llevar”.

Sí, Gregory nunca fue una persona impulsiva.

Como jefe del Regimiento Dragón y como líder de la familia Graham, él siempre había sido el primero en planear antes de la ejecución y siempre tenía todo bajo control. Esta vez, sin embargo, tenía mucha prisa.

Vickie era su armadura, pero también su debilidad.

Con la vida de ella en juego, él había intentado con todas sus fuerzas calmarse, pero era como una chispa reprimida. Puede que no sea nada al principio, pero una vez que haya una pequeña fuente de ignición, un incendio puede arder inmediatamente y extenderse rápidamente.

Eventualmente, Gregory todavía fue lo suficientemente sensato como para sentarse a regañadientes.

Gideon apaciguó al viejo por un tiempo antes de preguntarle seriamente: “Abuelo, no bromees sobre este asunto. ¿Estás realmente seguro de que el jade no está contigo?”.

El Abuelo Brooks lo miró, regodeándose.

“¿Por qué iba a mentirles? Si no me creen, búsquenlo ustedes mismos. Si pueden encontrarlo aquí, pueden llevárselo”.

Las cejas de Gideon se fruncieron con fuerza.

Si se atrevía a decirlo, entonces era obvio que el Jade Arcano no estaba con él.

“¿Por qué no nos lo dijiste antes?”.

Debido a esto, ellos se retrasaron dos días.

El Abuelo Brooks se rio entre dientes. “Ustedes son estúpidos, así que ¿por qué debería decirles? No soy yo el que se está muriendo. Además, solo porque fallaron en adivinar esto, no significa que otros no lo hayan adivinado. ¿Esta niña no sabía de esto anoche? Si ella no quiere decirles, no hay nada que yo pueda hacer al respecto”.