Consentida por el Presidente: Mi esposa es un poco dulce romance Capítulo 994

Incluso sin el Señor Donnelly traduciendo, el niño entendió vagamente lo que Cathy dijo por su expresión.

Él no dijo nada y bajó la cabeza, mordiéndose el labio.

El Señor Donnelly lo miró y no pudo evitar suspirar. “Estos niños normalmente son huérfanos. El País T no es como el nuestro. Muchos huérfanos no tienen adónde ir y terminan con hambre en las calles, pero nadie los contratará, y mucho menos los enviarán a la escuela”.

Cathy finalmente entendió y sintió lástima por el niño. Lo pensó, sacó todo el dinero que tenía en su bolso y se lo dio al niño.

“Tómalo. No es mucho, pero esto es todo lo que puedo hacer por ti. Sé bueno y no vuelvas a hacer esto”.

El niño se quedó paralizado y la miró.

El Señor Donnelly dijo: “¿Por qué estás ahí parado? Tómalo”.

El niño luego tomó el dinero y huyó.

Sean frunció el ceño mientras veía al chico salir corriendo, suspirando. “Cathy, eres demasiado amable”.

La mente de Cathy estaba un poco distraída mientras suspiraba. “No es que sea demasiado amable. Es el mundo que es demasiado cruel. Mucha gente sufre, ¡y él es solo un niño! Tener que vivir así…”.

Nell intentó animarla. Ella también se alegró un poco de ver a Gregory y Vickie aquí, así que cambió de tema. “Hola, Gregory. ¿Qué te trae por aquí?”.

Él respondió monótonamente, “Tenía algunos asuntos de los que ocuparme”, antes de hacer una pausa y mirar a los demás. “¿No nos vas a presentar?”.

Nell se dio cuenta y se apresuró a presentar a todos, sonriendo. “Ah, sí. Esta es mi madre, y este es Sean Miller, el esposo de mi madre”.

Cuando Gregory miró dos veces, su rostro se llenó de escepticismo. En tan poco tiempo, Nell ahora tenía una madre y ¿era la esposa de Sean?

Él pensó que era la madrina de Nell hasta que Cathy se presentó: “Hola. Soy Cathy Morrison”.

Su mente dejó de funcionar por completo.

¿Tan poco tiempo con Nell la iluminó y provocó que Cathy fuera menos repulsiva hacia los extraños?

¡Ella incluso podría presentarse a Gregory y a Vickie! Él en serio estaba estupefacto.

Gregory la miró con incredulidad antes de voltearse hacia Nell. “¿No es ella…?”.

Nell frunció los labios. “Es… una larga historia. Te lo contaremos después”.

Gregory asintió. Uno no simplemente se va después de saludar a un viejo amigo, por lo que regresaron juntos al hotel y se dirigieron a la cafetería cercana.

Cuando el Señor Donnelly vio que tenían cosas que discutir, él se retiró.

Pidieron una habitación privada y se sentaron. Nell les contó toda la historia sobre su madre a Gregory y a Vickie. Él estaba sorprendido, por decir lo menos. Era imposible sin importar cómo lo pensara.

Aun así, cuando Cathy murió, mucha gente fue a recuperar su cuerpo, pero nunca fue encontrado.

Gregory no notó su expresión y solo asintió. “Está bien. Te lo haré saber entonces”.

El grupo se sentó por un rato más y bebió té mientras charlaban. Hablaron del embarazo de Nell y Gregory y Vickie los felicitaron.

Nell estaba un poco preocupada por el estado de Vickie, pero ella se veía bien y saludable. Ella había estado tomando la medicación que le dio Jeff y los síntomas no habían aparecido desde la boda, para el alivio de Nell.

El grupo continuó charlando hasta la medianoche antes de regresar.

En el camino de regreso, Nell se aferró al brazo de Gideon y preguntó: “¿Jeff podría estar mintiendo? ¿Qué pasa si la enfermedad no es genética como él dice? ¿Por qué no dejar que el Tío Sean eche un vistazo ya que está aquí? Podríamos descubrir algo”.

Gideon sonrió. “No creo que esté mintiendo. Gregory hizo que revisaran a Vickie y no había nada fuera de lo común. Y todos los miembros de la familia Flinders conocen esta enfermedad genética. Dudo que se le ocurra una mentira así, ya que quedaría expuesto inmediatamente”.

Nell asintió. “Es verdad…”.

Él continuó: “Pero de hecho me hiciste recordar algo. Sean es considerado como el Doctor Sobrenatural por el público en general, ya que muchos de sus métodos son poco convencionales. No reciben tanta atención de la medicina convencional debido a eso, pero a veces sus métodos funcionan extrañamente bien. Tal vez no sea una mala idea que le eche un vistazo a Vickie”.

Nell sonrió. “Se lo contaré más tarde. Quizás mañana funcione”.

Gideon gruño. “Espera un momento. No hay necesidad de apresurarse. Pregúntale a Gregory si está dispuesto a dejar que Sean la examine primero”.

Ella asintió y le dieron a Gregory una llamada.

Para ser franco, Gregory ya estaba pensando en eso cuando vio a Sean por primera vez.