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Su cabello todavía estaba mojado por la ducha. En contraste con su inmaculado yo habitual, había una especie de belleza descuidada en él.
Con los dos pequeños encima de Nell, su rostro se tornó hosco mientras él gritaba: “Vayan a jugar por ustedes mismos y dejen a su madre en paz”.
Sentada frente a la mesa del comedor, Lizzy puso una cara seria. “Papi, tuviste a Mami para ti solo por tantos días. Hoy es nuestro turno con ella. Eres un adulto. No puedes competir con nosotros, los niños”.
Gideon se sintió provocado hasta el punto de la risa por sus palabras contundentes. “¿Competir qué? No tienes derecho a luchar por mi esposa”.
Lizzy hizo un puchero. “¡Papi, eso no está bien! Ella también es nuestra Mami”.
“¡Ja!”. Gideon esbozó una sonrisa gélida.
Nell no pudo contener la risa cuando vio que el adulto y los niños se ponían rojos mientras discutían. Ella tiró del brazo de Gideon. “Es suficiente. ¡Qué les estás diciendo a los niños! Déjame jugar con ellos un rato mientras tú haces lo que tienes que hacer”.
Gideon frunció el ceño. “Pero tu salud…”.
“Me he estado sintiendo bien”. Sintiendo una calidez en su corazón, Nell le dio un empujón. “Ve a ponerte a trabajar”.
Impotente, Gideon se despidió.
Nell jugó con los niños toda la mañana y, por la tarde, recibió una llamada de Vickie. Ella todavía estaba bastante preocupada por la situación en la que se encontraba Vickie, por lo que preguntó sobre su progreso en el momento en que se conectó la llamada.
Sin embargo, Vickie sonaba un poco deprimida. “Hemos verificado que la información era falsa. El jade que se descubrió no era el Jade Arcano, solo uno ordinario”.
Nell se sorprendió y se arrepintió a la misma vez porque estaba al tanto de lo que significaban las noticias para Vickie.
Faltaban solo tres meses más para el año nuevo.
Jeff exigió que lo encontraran todo antes de Año Nuevo. De lo contrario, dejaría de darle la medicina a Vickie.
Por el momento, solo habían encontrado una pieza de jade. A este ritmo, no podrían completar el conjunto que aún le faltaba cinco piezas.
Con eso en mente, Nell frunció el ceño. “¿Tienes alguna otra pista a mano?”.
“Tenemos una, pero necesita ser verificada. Ha habido un pequeño problema en la Ciudad Lin, así que vamos a ir allí para solucionarlo primero”.
Nell asintió. “No te preocupes. Estoy segura de que podremos reunir las seis piezas antes del Año Nuevo siempre que trabajemos juntos”.
A pesar de sus preocupaciones, ella consoló a Vickie como tal.
Vickie sonrió. “Lo sé, y gracias”.
La pareja charló por un rato hasta que llegó la hora del almuerzo cuando Nell terminó la llamada.
Después de colgar, se sumergió en sus pensamientos antes de enviar un mensaje a Janet y a Liam para que le echaran un ojo de cualquier cosa sobre el Jade Arcano.
Liam y Janet sabían de la enfermedad de Vickie. Después de todo, habían estado presentes en la boda. Sin embargo, aunque sabían que Vickie estaba enferma, no estaban familiarizados con la enfermedad que tenía ni de la negociación con Jeff.
Janet incluso se burló de Nell por preguntar sobre el paradero del Jade Arcano.
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