Desde un matrimonio falso romance Capítulo 249

Y en ese momento, el ayudante echó un vistazo a la expresión del director y preguntó con cautela:

—Director, ¿continuamos con la emisión?

—Sí.

El público que estaba viendo la emisión en directo también se dio cuenta de que las palabras de Mariana no fueron interrumpidas y que el programa seguía emitiéndose.

—¿Qué pasa? ¿Acaso el vestido de Diana no es realmente el diseño original de Mariana? Entonces, ¿quién cambió el diseño?

—¿Podría ser Diana? Debe ser ella, aparte de Mariana sólo Diana tiene acceso al vestido.

—¿Cómo es posible? No digas tonterías, Diana no puede hacer estas cosas, ella es la persona más sencilla y amable.

***

Todos estaban discutiendo mientras esperaban.

Diana miró a todos y sonrió con impotencia.

En ese momento, la moderadora dijo:

—¿Qué quiere decir Diana con ese movimiento?

Con una emoción en sus ojos que la gente no pudo descifrar, Diana giró la cabeza y sonrió amablemente hacia la moderadora, y luego miró hacia la cámara y dijo:

—Naturalmente, también espero que Mariana pueda demostrar su talento real. Después de todo, esta es una gran plataforma, si puede diseñar muy buenos trabajos, entonces definitivamente tendrá una gran reputación, lo que también será bueno para su futura carrera.

Ante estas palabras, la moderadora se apresuró a decir:

—Como juez, Diana también da un voto de apoyo esta vez, y también espera que el equipo del programa pueda dar a la diseñadora Ortiz otra oportunidad para que logre demostrar su capacitad.

Tras una pausa, la moderadora esperó las instrucciones del director, y después de recibir una respuesta afirmativa, miró a Mariana.

—Como todos los jueces están de acuerdo, entonces damos a la diseñadora Ortiz 10 minutos para dejar restaurar el diseño original.

Cuando las palabras cayeron, el público se sorprendió.

Darle 10 minutos para transformar el vestido era una tarea muy difícil, casi imposible de realizar.

Sin embargo, María asintió en señal de aprobación, miró al público y dijo:

—Queremos asegurarnos de que esta concursante tenga la oportunidad de probarse a sí misma y, al mismo tiempo, dar la máxima equidad a los demás concursantes, así que diez minutos es lo justo.

Un estruendoso aplauso estalló después de las palabras de María.

Cada oportunidad era fugaz, y si no la aprovechabas, perderías más.

En ese momento, la moderadora se dirigió a Mariana y preguntó:

—Diseñadora Ortiz, ¿aceptas ese reto?

Sin hablar, Mariana se puso en acción, giró la cabeza para mirar a Diana y sonrió.

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