DESVIADO (COMPLETO) romance Capítulo 47

Agus y yo trajimos las pinturas y todos nos concentramos en una parte de la pared, la verdad que el dibujo se me da fatal así que decidí escribir algo que me vino a la mente de repente.

"Te desvanece como la luz de la noche, al llegar el alba iluminando la vida en la tierra y llevando claridad al mundo, mantienes fijo mi camino y mi la dirección"

— ¿No es muy cursi para ti?— se burló Zerek.

Lo miré mal, sus cambios de actitud solo me confunden más. Mire su dibujo para burlarme de él, pero curiosamente no era malo, muy sombrío a mi parecer, pero significativo si te lo quedas mirando por mucho tiempo.

— ¿Quién es la chica?— pregunté.

Este escribió a un lado del dibujo el nombre "Analía" dejándome con la duda ¿Quién será esa chica? La última vez menciono que la persona que ama está muerta ¿Será ella? Quisiera preguntarle, pero sé que no me va a responder.

— Pensé que a Connor le gustaban los chicos como tú... Benjamin es totalmente opuesto— exclamó Zerek cambiado de tema mientras se limpiaba las manos.

Siento que ya no sé que es lo que realmente quiere, no estoy enojado con él porque es su decisión con quién se mete, pero no me gusta la influencia que causa ese chico en él.

— ¿Cómo es Benjamin según tú? Por qué yo veo a un chico inteligente, con mucho conocimiento en su cerebro, pero su personalidad apesta...es muy grosero y egocéntrico casi se parece a ti— murmuré con fastidio mientras veía como aquella pareja se tiraban pintura.

A lo lejos Agus miraba aquella escena cariñosa con melancolía y celos ¿Por qué me siento mal por él? Por qué sé que es lo que se siente estar en su posición.

— No es tan malo como lo quieres hacer ver, le cuesta confiar en las personas, pero en el fondo en buena persona, solo dale una oportunidad porque después de todo Connor parece muy feliz con él— dijo Zerek.

¿Feliz? Connor solo está confundido lo sé, por esa razón pensaré en un plan para que se dé cuenta de que al que quiere es a Agus.

— Si tanto te agrada ese chico, ve y dile que finja ser tu novio— exclamé molesto.

Aquel hombre de ojos azules me abrazo por detrás y colocó su cabeza en mi hombro antes de dejar un beso casi fugaz en mi mejilla.

— Al único que quiero como novio falso es a ti— susurró.

Sentí mi piel estremecerse y mi rostro arder, me gustaba estar así no lo niego y no me faltan las ganas de cogerlo del cuello para besar aquellos labios adictivos.

— ¿Puedo besarte?— murmuré sin pensar.

Me sentía en mi mundo y hasta dispuesto a olvidarme de todos los presentes.

— Tal vez más tarde— me provocó antes de alejarse de mí para acercarse a Lara.

Lo seguí casi por inercia, la pequeña estaba concentrada pintando algo que no lograba ver porque Zerek estaba en medio. Decidí dejarlos por un momento para ver a Agus que parecía pensativo y triste.

— ¿Todo bien?— pregunté preocupado.

Él respiró profundo y negó antes de volver a su pintura. Me sentí inquietó al ver aquella figura, no tengo que pensar mucho para saber que Agus no está bien. Casi termino de estudiar psicología y es la primera vez que siento que tengo que hacer algo por alguien.

— ¿Has hablado con Zac?— pregunté tratando de que esté pensará en otras cosas.

El dejo el pincel de lado y comenzó a limpiar sus manos.

—Un poco por mensaje, él siempre me escribe para preguntarme cómo estoy...es muy bueno conmigo y por eso tengo miedo de pedirle que sea testigo del juicio— susurró asegurándose que los demás no lo escucharán.

Zac y yo fuimos los más afectados, pero no podemos olvidar que después de todo Agus fue el que vivió más abusos, su padre lo mantenía drogado y los alejo de todo haciéndolo pasar por muerto.

— Tranquilo, no te preocupes por eso seguro Zac nos apoyará está más que claro que no queremos a este tipo libre— dije tratando de animarlo.

Agus iba a decir algo, pero Lara se acercó a nosotros muy animadas.

— Mi príncipe dice que mi dibujo quedo perfecto, véanlo— dijo muy animada mientras agarraba a Agus y a mí del brazo.

Me sorprendí demasiado ante su toque porque no parecía inquieta o asustada, Zerek sonrió al ver que la pequeña sostenía nuestras manos con total confianza.

— Una mariposa igual de hermosa que tú— Halague.

Yo con 21 años y no puedo dibujar ni un círculo bien y Lara con 11 años logra pintar como profesional.

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