DESVIADO (COMPLETO) romance Capítulo 80

Tarik

No le escribí ni lo llame, no lo volví a buscar en todo el día esperado que él me buscará a mí ¿Creen que lo hizo? No lo hizo simplemente no me ha hablado al parecer realmente no le importa que pase conmigo. Por eso haré lo que se me dé la gana, que se joda él, es imbécil que ni siguiera se da cuenta de que solo quería un poco de su atención no le estaba pidiendo nada del otro mundo.

Mi clase terminó y algo dentro de mí de forma ilógica esperaba que Zerek se acercará hablarme, camine por toda la universidad buscando de forma disimulada y lo encontré sentado en la cafetería de los profesores trabajando aún en su computadora, a quien engaño quiero verlo y mi enojo desaparece cuando lo tengo cerca. Antes de acercarme a su mesa decidí comprar la especialidad de la cafetería, el postre de tres leches para dárselo a Zerek seguro tiene hambre.

— Algo dulce para que se te quite la amargura que cargas—dije mientras colocaba el postre a su lado.

Este me miró por unos segundos antes de contestarme fríamente.

— No es bueno que te estés acercando mucho a mí en la universidad, se crearán rumores—me recordó.

Me aseguré que nadie estuviera mirándonos, al parecer solo estábamos nosotros en la cafetería porque las señoras de la cafetería estaban concentradas organizando el menú para mañana.

— Solo quería traerte algo de comer— murmuré con tristeza, odio esto, no me gusta sentir que estorbo — Sé que estás ocupado y perdón si te interrumpo solo quería verte un rato porque me hacías falta...me estoy comparando como un niñato discúlpame no te molestaré más— dije apresurándome a salir de ese lugar.

No era de esperarse que no me siguiera, no me gustan que las cosas sean así ¿Dónde quedaron las palabras que me dijiste? Tal vez me imaginé todo eso.

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Había terminado de hacer un trabajo de metodología de la investigación que parecía eterno y decidí salir a tomar aire para pensar todo lo que está sucediendo en mi vida, tal vez si no hubiese ido a su oficina aquel día nada de esto estuviera pasando, yo seguiría siendo un estudiante x para él y no tendría estos sentimientos que me hacen sentir nervioso.

— Te ves fatal— exclamó una voz familiar detrás de mí.

Maldito imbécil si no fuera por Connor ya te hubiese mandado a la mierda aún no se me olvida lo que hiciste.

— Gracias siempre me levanto y me miró al espejo y me digo hoy quiero verme más fatal que ayer— exclamé con sarcasmo.

Este se colocó enfrente de mí, si se parecía mucho a Zac físicamente y creo que por eso a Connor le gustó.

— Pues lo logras muy bien... pero no vengo a hablar de tu físico, aunque deberías cuidarte más... en fin quiero arreglar las cosas contigo porque en verdad me gusta Connor —dijo esto último en un tono muy serio.

¿Y crees que las cosas se van a arreglar tan fácil? En serio eres un imbécil.

— Que genial ahora tengo tu lástima, mejor vete de aquí no importa que digas solo tenerte cerca me causa dolor de cabeza— confesé.

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Mentiría si digo que no estoy pensando en Zerek, las palabras de Brenda comienzan a tener sentido, no me gusta ser un secreto, quiero alguien a mi lado al que pueda besar y abrazar. Quiero alguien que grite con locura que me ama.

Tal vez nunca debí volver a intentar algo con Zerek, él tiene su mundo y no tiene espacio para mí, quiero alguien que esté ahí para mí incondicionalmente que me ame como yo lo amo, no quiero conformarme, no lo haré más.

Me levanté de mi cama y busque mi celular, es hora que haga lo que es correcto para mí, no estoy dispuesto a aguantar que alguien me trate como él me ha tratado, él nunca vino detrás de mí, tal vez lo empuje a un camino que él no quería.

Marqué su número, me contestó al instante lo cual me hizo sentir más ansioso, pero no iba vuelta atrás.

— No hables— pedí cuando sentí que su respiración era profunda como si estuviera suspirando— Fue un error ir a tu casa aquel día, las cosas nunca debieron continuar tú tienes un mundo muy diferente al mío, no quiero esperar y conformarme con verte a escondida aun cuando tengo ganas de besarte cada que te veo— las palabras salía muy seguras de mi boca aunque en el fondo mi corazón estaba muy acelerado— Quiero alguien que esté a mi lado y no tenga miedo de gritar que me ama, tú no eres ese alguien, tú ni siguiera estás seguro si lo que sientes por mí es más que un gusto... tal vez ni eres gay y solo querías experimentar—dije sintiendo mis manos sudar y piernas temblar.

Duele decir esto, pero no quiero salir más lastimado.

— Ahora soy el que termina esto que ni siquiera tenía nombre, seguro encontrarás una chica con la que te casarás y yo encuentre a un chico...no quiero que digas nada simplemente deseo que todos los problemas en tu vida se resuelvan, esta vez no volveré a buscarte lo prometo— dije antes de colgar