Dilema entre el Odio y el Amor romance Capítulo 242

"¡¿Qué?!". Margarita abrió los ojos como platos y le preguntó a Estefanía en voz baja, "¿De Carlos contigo? ¡Quién diría que el Sr. Mendoza tendría esos gustos!".

Estefanía ya no estaba para bromas, le respondió en un susurro con el ceño fruncido, "Es más importante que unas fotos íntimas. Si alguien lo encuentra, ¡estaré muerta!".

"¿Será que se quedó en mi carro?". Margarita salió del asiento trasero y dijo, "Te has subido a mi auto".

Despeinada y con cara de preocupación, Estefanía suspiró y respondió, "Bueno, vayamos a ver si está en tu auto".

"Pero llevé mi auto al taller y quizás...". Margarita se detuvo a mitad de la frase y puso una cara como si hubiera visto un fantasma cuando miró por encima del hombro de Estefanía.

Estefanía estaba acostumbrada a hacer bromas con Margarita, así que hablaba sin filtros, ¡pero si alguien más las escuchara, estarían en problemas!

Se le tensó el cuello y miró hacia donde Margarita estaba viendo, había un hombre que las estaban observando sin expresión alguna.

¿Así que así hablaban de él Margarita y Estefanía cuando estaban solas?

Carlos le echó una mirada a Margarita.

"Este... ¡Voy a ver si encuentro algo en mi auto!". Margarita encontró la excusa perfecta y salió corriendo.

Estefanía vio cómo Margarita se alejaba y no pudo evitar maldecir por lo bajo. ¿Por qué Margarita tuvo que mencionar a Carlos?

"¿Así que no hay rodaje esta tarde?". Carlos dirigió su mirada hacia Estefanía y le preguntó en voz baja.

"Tal vez tengamos que rehacer una escena", respondió Estefanía mientras desviaba la mirada.

"Entonces no filmes más". Carlos se acercó, tomó su mano y la llevó hacia su auto.

Estefanía pensó que Carlos tardaría unos días más en volver, pero regresó después de sólo dos o tres días.

Últimamente, él volvía con más frecuencia, y eso ponía a Estefanía en una situación peligrosa porque siempre temía que él perdiera el control.

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