¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia romance Capítulo 11

Maribel estaba aterrada, su corazón latía como un tambor.

¿El Sr. Griera había reconocido a Elia? ¿La desenmascararía y la enfrentaría por sus mentiras?

Maribel estaba pálida y tensa, solo podía mirar fijamente a Elia. Sus labios temblaban, buscaba palabras, pero se dio cuenta de que no podía decir nada, el miedo, el pánico, la frustración, el terror, todas las emociones la torturaban hasta el punto del sufrimiento.

"Señorita secretaria, ¿te interrumpí hace un rato? Lo siento mucho, iré a trabajar de inmediato y no volveré a hacer ruido", Elia se disculpó apenada con Maribel.

En la entrevista, le advirtieron que las personas en el piso superior eran importantes y que debía mantenerse lo más silenciosa posible mientras limpiaba para no molestarlas, de lo contrario, tendría que hacerse responsable de las consecuencias.

El altercado con Vania y la discusión con Asier debieron haber perturbado a la secretaria Maribel, por eso estaba tan alterada.

Después de decir aquello, Elia tomó su trapeador y se fue.

Maribel no la detuvo, no sabía qué actitud debía tomar ante el presidente. Su voz se suavizó, probando el terreno y solo dijo: "Sr. Griera, buenos días".

La única respuesta de Asier fue un asentimiento, su tono no revelaba ninguna emoción. Pero sus ojos eran fríos y temibles.

Maribel estaba en alerta, su corazón latía rápido y estaba preparada para asumir la responsabilidad de su engaño en cualquier momento.

Elia se dirigió rápidamente hacia el trastero, escuchó a Maribel llamar a ese hombre, y se le erizó la piel, como si hubiera recibido un shock eléctrico.

¿Cómo no se le había ocurrido que ese tal "Asier" era el presidente de Grupo Griera?

El encargado del club nocturno dijo que era un jefe. Lo vio un día antes en el baño del último piso, lo volvió a ver ese día en el ascensor. Además, recordaba que su querido Joel dijo que quería disculparse con Asier.

En aquel momento no le dio importancia al nombre. ¿Cómo no se le ocurrió que su jefe era el presidente de Grupo Griera?

Qué cabeza de chorlito que tenía. Elia se golpeó la cabeza en señal de arrepentimiento.

Había molestado a Asier dos veces en su territorio, no era de extrañar que él pensara que ella estaba tratando de acercarse a él para seducirlo.

Eso era un gran malentendido.

Elia entró al trastero como si estuviera huyendo, decidió que desde ese momento en adelante evitaría a Asier tanto como pudiera para no meterse en más problemas.

Asier observó a la mujer huir con una mirada intensa, luego volvió su fría mirada hacia Maribel. Eso hizo que el ya nervioso corazón de Maribel latiera aún más rápido.

"Dije ayer que no quería a nadie más en este piso. ¿Por qué no se ha hecho?". La voz de Asier era profunda, dominante y autoritaria. Siempre había estado por encima de los demás y estaba acostumbrado a hablar así.

Maribel se quedó atónita, se dio cuenta de que no estaba hablando de su engaño, respondió rápidamente: "Mejoraré la gestión, esto no volverá a suceder".

"¿No volverá a suceder? ¿Cómo dejaste pasar a esa mujer, Rosalinda, por delante tuyo sin hacer nada?". Asier avanzó rápidamente hacia su oficina, claramente descontento.

¿Rosalinda?

Cuando escuchó ese nombre, Maribel sintió un golpe de sorpresa y alivio. Resultaba que Asier no había reconocido a Elia, la mujer con la que había tenido una relación, simplemente pensó que ella era Rosalinda. De repente, se sintió mucho más tranquila.

Capítulo 11 1

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