¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia romance Capítulo 1324

Capítulo 1324

Ella prefería dejar pasar a Gabriel, un verdadero patán, antes que permitirle conocer la verdad.

Ella preferia que él pensara que tenía una relación entrañable de padre e hija con Gabriel, antes que aclarar el malentendido y estar con él.

Hace cinco años, él le había dicho que se haría cargo de ella y hasta la llevó a conocer a sus abuelos.

Si no fuera porque el abuelo intercedió, él la habría tomado por esposa antes de enterarse de que ella era la hija de Gabriel.

Pero ella, increiblemente, no queria casarse con él.

Para escapar de él, incluso preferia cargar con el peso de una enemistad tan profunda.

Todo esto era porque no podía olvidar a Sergio, su corazón pertenecía únicamente a Sergio.

Ella tenia un trato diferente incluso al buen amigo de Sergio, Ramiro.

Prefería estar cerca de Ramiro que de él.g2

Asier pensaba en eso y su corazón, que siempre había sido fuerte y frío, le sangraba y le dolia terriblemente.

Cuando era pequeño, su padre le había dicho que nunca se enamorara de una mujer que no tuviera espacio para él en su corazón, porque el final sería trágico.

Sin embargo, no escuchó el consejo de su padre.

Terminó siguiendo los pasos de su padre, amando a una mujer que no tenía espacio para él en su corazón, al igual que su padre, enamorado de una mujer que solo quería huir de él.

Ahora comprendía que amar a una mujer que no te ama es doloroso, es amargo.

Pero él no era como su padre, ino iba a rendirse!

Iba a buscarla ahora mismo, a casarse con ella y a mantenerla a su lado por el resto de sus días.

“Bruno”, dijo Asier de repente.

Bruno, cuidadoso y atento, le respondió: “Señor Griera necesita algo?”

Asier le preguntó: “¿Qué se suele necesitar para una propuesta de matrimonio?”

“¿Qué?” Bruno se sorprendió, no podía creer lo que escuchaba.

¿El Señor Griera hablaba de una propuesta de matrimonio?

¿Pero a quién?

¿A Elia?

Tenía que ser Elia, porque Asier no tenía otra mujer en su vida.

Qué maravilla, Elia finalmente iba a ver la luz después de la tormenta.

Aunque Bruno nunca había tenido un romance, había visto muchas telenovelas.

Rápidamente le dijo: “Para una propuesta no puede faltar el anillo.”

¿El anillo?

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Capitulo 1324

Asier frunció ligeramente el ceño, recordando que el collar que le habia dado a Elia había sido destruido. No había nada en Elia que él le hubiera regalado.

Ir a comprarle un anillo a Elia no era mala idea.

“Vamos al centro comercial, le ordenó Asier

“¡Claro que sí, enseguida!” Bruno, más emocionado que Elia, giró rápidamente el volante.

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