El Amor Eterno é a melhor série atual do autor Internet. Com o conteúdo de Capítulo 1088 abaixo, nos perderemos em um mundo de amor e ódio, onde os personagens usam todos os truques para atingir seus objetivos, sem se preocupar com a outra metade, apenas para se arrepender tarde demais. Leia o capítulo Capítulo 1088 e acompanhe os próximos capítulos desta série em booktrk.com.
"Bien. Una vez que lleguemos, envía la dirección a Raine nuevamente".
Yara y yo llegamos al centro comercial en el centro de la ciudad. Le enviamos a Loraine nuestra ubicación antes de entrar al centro comercial. Después de eso, ambas entramos y compramos tranquilamente.
Ya que Yara se convirtió en la señora Gregg, ella había estado gastado más de lo que hacía antes.
Ella eligió su regalo generosamente y gastó algunas decenas de miles en comprar un reloj de lujo.
La elogié: "Eres tan generosa".
“Es nuestro primer encuentro, así que no puedo ser demasiado tacaña. Una vez que Cedar crezca y gane dinero, él me honrará a cambio”, dijo Yara.
"Tu planificación a largo plazo no es mala", le felicité.
Ella se rio entre dientes en respuesta.
No mucho después, Loraine finalmente llegó. Ella no se veía muy bien y preguntó: "¿Me veo horrible en este momento?".
Asentí y pregunté: "¿Qué pasó?".
"Recientemente, me he estado quedando despierta hasta tarde o toda la noche. Siento que me voy a morir por trabajar demasiado. No puedo continuar así. Tengo que arreglar mi rutina".
Yara preguntó: "¿Por qué estás pasando la noche en vela?".
"He estado aprendiendo a bordar recientemente". Ella suspiró. “Estoy preparando un bordado de un par de pájaros. Quería regalárselo a mi esposo cuando regrese al país, pero tengo las manos oxidadas, por lo que mi progreso es lento. Me preocupa pasarme de mi fecha límite".
Yara se rio de ella. "¿Por eso trabajaste toda la noche?".
“Quería hacer feliz a mi esposo”, respondió Loraine con confianza.
Me alegré de que ella finalmente encontrara su felicidad. Al menos ella sentía un amor incondicional y sincero.
"Vamos. ¿Escogemos algunos regalos?”.
Loraine caminó frente a nosotros y nos llamó: “¡Caroline, cuñada, caminen más rápido! ¡Se acaba el tiempo!".
Loraine se refirió a Yara como su cuñada abiertamente sin ningún desprecio. Parecía que finalmente dejó ir sus largos años de juventud.
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