El Amor Eterno romance Capítulo 1121

[Joshua: Es demasiado tarde. Maurice ni siquiera me habla ahora, pero no está siendo así solo conmigo. Ignora a todos los que están del lado de Zachary].

La actitud de Maurice...

[Caroline: Es como un niño. Él perdió los estribos porque no puede conseguir lo que quiere. Sin embargo, aun así, tenemos que encontrar una solución a esto eventualmente].

[Joshua: Aah, hablaremos de eso más tarde. Hemos estado discutiendo durante tantos años, aunque no lo hicimos...].

[Joshua: Bel, seré franco contigo. La relación entre Maurice y yo es un poco complicada. ¿Cómo debería decirlo? Estamos como en una relación ambigua. Han pasado años, pero no decimos oficialmente que estamos juntos. Aunque peleamos mucho, aun así, confiamos el uno en el otro. El problema es que él sigue perdiendo los estribos. Puedo aceptarlo una o dos veces, pero no por mucho tiempo].

Había pasado algún tiempo desde que supe de la historia de Joshua y Maurice. Sin embargo, solo me enteré en secreto.

Joshua no sabía que yo sabía de su relación. ¡¡Era la primera vez que él compartía esto conmigo!!

Actué sorprendida a propósito.

[Caroline: Ustedes son…].

[Caroline: Tercer hermano, ¡felicitaciones!].

[Joshua: Aah].

[Caroline: Tercer hermano, tienes que persuadirlo].

[Joshua: Pensaré en algo más tarde].

[Caroline: Está bien. Por cierto, cuida bien de Cedar por mí].

[Joshua: No te preocupes. Eso haré].

Después de eso, le envié un mensaje a Tucker y le pedí que le entregara el poder y los recursos de Ciudad Wu de la familia Schick a Charles. Él se preocupó y respondió.

[Tucker: ¿Entregarle todo a él?].

Si le dábamos todo a Charles, eso significaba que le habríamos abierto las puertas de Ciudad Wu. Yo estaba dispuesta a confiar en él una vez más.

[Caroline: Sí, entrégaselo a él. Él debería saber el resultado final].

Unos minutos más tarde, Charles me envió un mensaje.

[Charles: Eres tan lenta para hacer las cosas].

Charles se quejó de que hacía las cosas sin prisa.

Como se veían bonitos, volví al hotel y me los puse.

Cuando volví a salir, ya era de noche. Llegó la puesta de sol y puso el cielo en un tono naranja dorado. Fui al mercado una vez más para pasear. Cuando entré, me llamó la atención la dueña de uno de los puestos porque parecía asiática.

Junto a ella había una niña de unos cuatro años. Parecía mestiza.

Le pregunté en inglés: "¿Puedes hablar catisiano?".

Ella asintió con la cabeza y dijo: "Bueno, sé un poco".

Ella respondió en catisiano.

Le pregunté a la dueña del puesto con una sonrisa: “¿Es esta tu hija? Ella es bonita".

Vendían bandas para el pelo.

"Así es. Su nombre es Bambi", explicó la dueña.

"¿Es su apodo?", pregunté.

La niña asintió y me respondió: "No hablo bien catisiano, así que te hablaré en inglés. Mi nombre completo es Jeanette Jean y mi apodo es Bambi”.