El Amor Eterno romance Capítulo 1167

Cuando Cedar llegó a casa, me dio una rosa fresca. Dijo que era un regalo de Zachary.

Al oír eso, agarré la rosa con mucho cuidado y la puse en el jarrón del salón.

Cuando Joshua se despertó, yo ya había desayunado. Después de desayunar, Cedar volvió a su habitación para dormir un poco.

Salí y llevé a Pastor Uno y a Pastor Dos a dar un paseo fuera. Cuando estaba regresando, vi a un extraño parado junto a la puerta. Se presentó como Sam Young, el nuevo guardaespaldas de Cedar.

Asentí con la cabeza. "No tienes que hacer guardia junto a la puerta. Ve y espera en el coche. Es agotador estar aquí todo el día".

Sam se sorprendió. "Sí, señora Schick".

Llevé al Pastor Uno y al Pastor Dos de vuelta a la villa. Joshua ya había terminado de desayunar. Cuando llegué a casa, él estaba jugando al escondite con mis dos hijos.

Le pregunté a las niñeras: "¿Qué pueden comer ahora?".

"Como pronto dejaremos de darles pecho, pueden tomar leche en polvo".

"Entonces prepararé la leche", dije y tomé la iniciativa de ocuparme de la tarea.

Cuando terminé de ocuparme de los niños, recibí una llamada de Lance.

Su tono era muy amable cuando me preguntó: "Señorita, ¿estás libre hoy?".

Recordé lo que me sugirió el día anterior.

"Sí. ¿Nos vamos ya?".

"Será en la próxima ciudad. Iremos temprano y regresaremos temprano".

"¿Podemos volver esta noche?"

Lance me dijo: "Sí, podemos".

Subí las escaleras y me cambié. Cuando bajé, Joshua se sorprendió al verme vestida de forma elegante. Preguntó con curiosidad: "Bel, ¿a dónde vas?".

"Voy a asistir a una actuación musical. Tercer hermano, ¿quieres venir?".

"Hoy tengo que presentarme en la oficina". Suspiró. "Bel, ¿por qué no se lo dices al segundo hermano? Así podré tener otro día libre y jugar contigo".

¡Joshua siempre quería que lo defendiera!

Lo rechacé inmediatamente. "Sigue soñando".

"¿Bel, por favorcito?".

Lance era uno de los mejores pianistas del mundo. Muchas personas con talento se reunían a su alrededor sin importar dónde estuviera.

Era la primera vez que participaba en una actuación tan grande. Por ello, no pude evitar sentirme nerviosa. Sin embargo, Lance se quedó reconfortándome a mi lado e incluso había elegido personalmente un vestido para mí.

Antes de subir al escenario, practiqué una y otra vez la pieza que él me había preparado. Cuando subí al escenario, todavía me sentía ligeramente nerviosa. Lance era muy observador y se dio cuenta de mi nerviosismo. Me puso la mano en el hombro y me preguntó: "Señorita, ¿estás asustada? No lo pareces".

Me esforcé al máximo y mantuve mi sonrisa. "Conozco a esas personas que están sentadas allí. Son todos pianistas prestigiosos y muy reputados. Mi técnica no es más que un truco frente a ellos".

Lance suspiró. "Sigues teniendo miedo".

Negué con la cabeza y dije: "Esa gente es demasiado estimada".

Para mí era una gran presión actuar delante de los maestros.

"Yo soy aún más estimado que ellos. Si puedes actuar bien delante de mí, ¿por qué tienes miedo de actuar delante de ellos?".

Bueno, lo que dijo tenía sentido.

"Lance, me esforzaré al máximo...".

Él dijo con amabilidad: "Te acompañaré".