Resumo de Capítulo 1254 – Capítulo essencial de El Amor Eterno por Internet
O capítulo Capítulo 1254 é um dos momentos mais intensos da obra El Amor Eterno, escrita por Internet. Com elementos marcantes do gênero Romance, esta parte da história revela conflitos profundos, revelações impactantes e mudanças decisivas nos personagens. Uma leitura imperdível para quem acompanha a trama.
En aquel entonces, la familia Schick tenía cuatro hijos que competían por la herencia.
Las otras concubinas debían estar insatisfechas de que Zachary llegara al poder.
"¿Puedes ser más específico? ¿Mi padre estaba totalmente inconsciente? Él estaba a cargo de la enorme familia Schick. ¿De verdad no tenía ni idea de todo eso?".
Chase se rió de repente y dijo: "En aquel entonces, la Vieja Señora también tenía sus propios planes. Quería matar a sus otros hijastros".
Seguí preguntando: "¿Qué pasó entonces?".
Tal vez mi tono era demasiado ansioso. Chase se dio cuenta de repente y murmuró para sí mismo. "¿Por qué te cuento todo esto? ¿Qué beneficio voy a obtener si aclaro tus dudas? ¡Deberías irte al infierno!".
Lucas sintió de repente problemas y quiso capturarlo. Sin embargo, el suelo debajo de nosotros se abrió de repente.
Lucas y yo rodamos y caímos en un túnel. Lucas reaccionó rápidamente. Me abrazó para protegerme de las duras superficies. Cuando caí al suelo, no tenía ninguna herida. Mientras tanto, el brazo de Lucas se cortó con unos bordes afilados. No era una herida grande, pero sangraba.
Reaccioné rápidamente y le ayudé a vendar su herida con las vendas que me quedaban.
Después de vendarle la herida, le pregunté: "¿Qué hacemos ahora?".
Mantuve la calma. Sabía que no era el momento de entrar en pánico.
"Esperemos un poco. Voy a echar un vistazo para ver dónde estamos".
Aunque hablaba en voz baja, su voz me tranquilizó.
"Perdí accidentalmente tus auriculares", le dije.
No estaba segura de dónde había caído.
De repente, las canciones de la ópera volvieron a sonar en el espacio reducido.
Era como si la voz de Stella sonara junto a mis oídos.
Me asusté y grité de miedo. De repente escuché unos ruidos de lucha desde un lado. Lucas me envolvió en sus brazos y me tapó los oídos. Intentó calmarme.
"Señorita. No hay fantasmas en este mundo. Han creado el ambiente a propósito para atacarla psicológicamente. Cierre los ojos. No intente mirar nada ni escuchar nada. ¡Déjame el resto a mí!”.
"Lo siento, Carol. Me das pena cuando te ves así. Te voy a noquear primero para que puedas evitar tus miedos".
Esas fueron las últimas palabras que escuché de Lucas antes de desmayarme.
Antes de perder completamente la conciencia, oí la voz helada de Lucas gruñir sombríamente. "Chase. Deja de montar un espectáculo. Ahora no puede ver ni oír nada. Ustedes nunca le harían daño".
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