El Amor Eterno romance Capítulo 1379

"Señor Moore, el Señor Adrian está consciente que él fue en contra de su voluntad. Él dijo que será la primera y la última vez. Además, que lo hizo por su bien, que por favor no le preste atención".

"¿Adrian te pidió que me dieras el mensaje?".

Lucas sonaba muy indiferente, se sentía extraño escucharlo hablar así.

La otra voz dijo con miedo: "Mis disculpas, Señor Moore".

Se escuchó un estruendo fuera de la puerta. Alrededor de un minuto después, la habitación volvió a quedarse en silencio.

Cuando abrí la puerta, vi un charco de sangre en la entrada. Mientras tanto, Lucas estaba sentado en su sofá mirando el paisaje fuera de la habitación. Él miraba el marchito árbol Parasol de afuera, nuevamente pareciendo estar desconectado de la realidad.

Me acerqué y le pregunté: "¿La sábana nueva está en el armario?".

Lucas tenía algunas manchas de sangre en sus manos.

Mi corazón tembló de inmediato.

Él me respondió con tranquilidad: "Sí".

Me quedé en silencio y caminé hasta su armario. Encontré una sábana gris oscura y ayudé a Lucas a cambiar las sábanas. Después de eso, salí de su habitación en silencio.

Por alguna razón, un gran temor creció dentro de mí.

Bajé las escaleras y pasé por la sala de estar. Orpheus ayudaba a limpiar las manchas de sangre de la cara de alguien. Esa persona recibió una fuerte paliza en la cara.

Cuando Orpheus me vio, él me instruyó: "Consígueme el botiquín de primeros auxilios".

Pregunté en voz baja: "¿Dónde está?".

Le respondí en catisiano. Cuando el hombre que estaba herido escuchó mi respuesta, se sorprendió y preguntó: “¿Hay otro extranjero en la villa además de nosotros?”.

"Es solo una chica que acaba de llegar aquí".

Orpheus me dijo dónde encontrar el botiquín. Lo tomé y se lo llevé. Él me dijo: "Ayúdame a desinfectar sus heridas".

La mayoría de las heridas en la cara del hombre eran aruñazos. Quizás fueron causados por el anillo en el dedo de Lucas.

Finalmente, entendí lo que Orpheus quería decir con que solo respondiera a lo que me preguntaban. Aquel hombre herido habló de más y Lucas lo molió a golpes.

¡Ese hombre era realmente aterrador! Él fue completamente irracional.

Saqué el hisopo del botiquín médico y lo sumergí en alcohol, luego ayudé a desinfectar la herida de aquel hombre. Le dolía tanto que jadeaba de dolor. Al final, él gruñó: "Lo haré yo mismo".

No discutí y lo dejé desinfectar sus propias heridas.

De repente, Orpheus me dijo: "Es difícil llevarse bien con la personalidad de Nébula. Será mejor que no lo hagas enojar por ningún motivo".