El Amor Eterno romance Capítulo 1418

Zachary me abrazó para calmar sus fuertes emociones.

Le tomó un tiempo aclarar su mente. Después de eso, finalmente me dijo: "Deberías irte a la cama temprano".

"Segundo Hermano, ¿puedes poner la alarma?", le pregunté e inmediatamente le expliqué: "Perdí mi teléfono".

Él preguntó con dulzura y voz profunda: "¿A qué hora?".

Zachary no me cuestiono por qué necesitaba la alarma. Se sentía satisfecho mientras yo me mantuviera sana y salva. Él nunca cuestionaba mis acciones.

"A las cinco de la mañana".

Zachary sacó su teléfono y me lo pasó. Lo tomé y puse la alarma a las cinco de la mañana. Le devolví su teléfono, pero él no lo agarró. En cambio, dijo: "Te aburrirás en el hotel. Puedes usar mi teléfono. Conseguiré uno nuevo para ti cuando regresemos a Ciudad Wu".

Le pregunté sorprendida: "¿Qué vas a usar entonces?".

Estaba segura de que él necesitaría su teléfono más que yo. Aunque él no ocultaba ningún secreto de forma deliberada, estaba segura de que él necesitaba su teléfono para trabajar. Sin embargo, él me lo prestó de buena manera para que no me aburriera.

"Otras personas están conmigo".

Rechacé su oferta y le dije: "Deberías quedarte con tu teléfono".

Estar aburrida no era motivo para quedarme con su teléfono.

"Bien. Vamos a la cama", él me sugirió.

Zachary había estado muy ocupado, así que rápidamente me fui a la cama para no afectar su descanso.

Seguí pensando en que tenía que levantarme temprano al día siguiente y no dormí lo suficiente. En el momento en que sonó la alarma, me levanté rápidamente y la apagué.

Zachary abrazó mi cintura con fuerza y ​​preguntó en voz baja: "¿A dónde vas?".

Le di un beso en la mejilla y le dije: "Deberías volver a dormir".

"¿Quién ha estado preparando el desayuno de Zachary durante los últimos dos días?".

El gerente respondió: "El personal de la cocina".

El gerente no sabía que Noelle era la cocinera. En ese caso, Zachary probablemente tampoco lo sabía.

Odiaba que a Noelle le gustara hacer cosas innecesarias para molestar a los demás. No solo eso, lo hizo en secreto. Ella quería que otros le debieran un favor sin hacérselo saber primero. ¡Era tan engreída como LG, quien ya estaba muerta!

Señalé a Noelle y le pregunté: "¿Por qué está ella aquí?".

La última vez, pensaba que Gwen Worth y Wendy Wale eran tan feas como los sapos. Ellos no muerden ni te lastiman, pero te molestan a propósito.

Lo que hacía Noelle en ese momento era lo mismo.

El gerente miró a Noelle y me respondió respetuosamente: "No estoy muy seguro. Tal vez, ella es una ayudante contratada para trabajar en la cocina. Aunque soy el director general de este hotel, no administro los recursos humanos".