El Amor Eterno romance Capítulo 1428

Leo seguía sin regresar a mí lado después de mucho tiempo. No recibí ninguna noticia de ellos.

Cuando Emmi llegó al hotel, Leo aún no se encontraba por ningún lado. Su expresión inicial de alegría desapareció inmediatamente. No solo eso, ella solo me dijo unas pocas palabras, y fueron con sarcasmo.

En su mayoría se quejaba de cómo hacía que Leo trabajara en medio de la noche y de que no sabía cómo tratar bien a mis subordinados. Incluso comentó que yo no merecía ser jefa.

Me daba pereza hablar con ella, así que le pedí a Tucker que le arreglara una habitación.

Leo pertenecía a la familia Schick. Él era parte de la familia. Él ha pasado toda su vida sirviendo a los miembros de la familia Schick, a menos que él quisiera voluntariamente dejar a la familia Schick, eso sería su decisión. Sin embargo, él se convertiría en un don nadie si se fuese y ya no sería digno de Emmi.

Por otro lado, era evidente que Emmi se preocupaba por Leo. Aunque todavía no eran marido y mujer, me di cuenta de que Emmi no podía vivir sin Leo.

De lo contrario, ella no habría viajado hasta donde yo estaba solo para verlo.

Dado que ese fue el caso, Emmi no habría podido tratar conmigo mientras Leo permaneciera en la familia Schick. No solo eso, ella no habría hecho cosas a mis espaldas en secreto.

Eso fue exactamente por lo que me tranquilizó la presencia de Emmi. Al menos, ella no se habría convertido en mi enemiga en circunstancias normales.

Más bien, ella no estaba dispuesta a convertirse en mi enemiga.

En otras palabras, ella no quería ser mi enemiga porque no quería ser enemiga de Leo.

Después de todo, Leo me servía. Dado que yo era su jefa, Leo seguramente me hubiese puesto como su prioridad.

Después de que Tucker arreglara una habitación para Emmi, recibí una carta de Florence. Ella envió a un mensajero para que me entregara la carta. “Nébula está sano y salvo”.

Finalmente, me sentí aliviada después de recibir la noticia.

Aunque el lado de Nébula dijo que ya estaba bien, Leo regresó al hotel con algunas heridas. Cuando Leo regresó, Emmi seguía en su habitación.

Ella oyó a alguien pasando frente a su habitación, así que se vistió con el camisón y abrió la puerta. Cuando vio a Leo, no se acercó a él de inmediato y lo ayudó. En cambio, me criticó con comentarios sarcásticos antes de regresar a su habitación.

Leo cubrió su herida y se disculpó impotente.

“Jefa, mis disculpas. Ella siempre ha sido así. Jefa, no se preocupe por ella”.

Estaba cansada de ser calculadora con Emmi sobre estos asuntos.

Le pregunté: “¿Cómo te lastimaste?”.

“Seguí al Señor Schick y trabajé con él”.

Leo estuvo con Zachary antes, pero solo él regresó con lesiones.

Zachary no estaba a la vista. ¿Dónde estaba Zachary?

Entré en pánico y pregunté: “¿Dónde está?”.

Leo me consoló y dijo: “Jefa, no se preocupe. El Señor Schick está bien. Me indicó que regresara primero al hotel para tratar mi herida. Él también me envió para darle un mensaje. Dijo que él estará de vuelta en el hotel mañana por la mañana”.

Zachary hizo que Leo me enviara un mensaje. Confié en que él estaría de vuelta en el hotel a la mañana siguiente. En ese caso, no tuve que esperar más por el día.

Además, no podía quedarme despierto hasta muy tarde por mi condición física. Necesitaba descansar mucho para mantener un horario regular. No podría volver a arruinar mi salud.

“Haz que Tucker te ayude a curar tu herida”, le dije.

Leo respondió respetuosamente: “Sí, Jefa”.

Después de eso, me alejé y volví a mi habitación.

***

Zachary dijo que no era necesario que él salvará a Lucas. Aun así, él se llevó a Leo y a otros hombres a esperar alrededor de la villa de Adrian. ¡No mucho después, alguien les informó que Lucas resultó herido por un disparo y fue capturado por los hombres de Jeremiah!

En ese momento, él estaba preso en la villa.

Cuando Zachary escuchó la noticia, encendió un cigarrillo y fumó lentamente. Después de dar una bocanada y hacer círculos con el humo, Leo finalmente se atrevió a preguntarle: “Señor Schick, ¿deberíamos rescatar a Nébula?”.

Zachary le preguntó: “¿Por qué Jeremiah capturó a Lucas?”.

Leo quedó atónito por la pregunta. Él dijo: “No estoy muy seguro”.

Al escuchar eso, Zachary se burló por la ironía de la situación. Dio otra calada a su cigarrillo y dijo: “Lucas no es digno de ser el enemigo de Jeremiah”.

No valía la pena que Lucas se convirtiera en el enemigo de Jeremiah.

Después de todo, Lucas nunca estuvo interesado en quién era Jeremiah y qué quería hacer. Aun así, Jeremiah lo capturó. Él supuso que Jeremiah debía haber ofendido a Lucas de forma imprudente.

¡¿Por qué Lucas siguió atacándolo con movimientos mortales y casi termina con su vida allí?!

Solo había una lámpara incandescente en el enorme almacén. Estaba justo encima de la cabeza de Lucas. Él permaneció en el almacén en silencio, como si estuviera pensando en algo.

Él siempre fue así, sumido en sus profundos pensamientos.

Unos siete u ocho minutos después, él parpadeó y agitó el brazalete de campana en su muñeca. Los tintineos crujientes y melodiosos se escucharon junto a su oído. Después de que Lucas se hipnotizó a sí mismo, su mente se volvió poco a poco borrosa mientras se quedaba aturdido.

En su mente, él seguía repitiendo lo que Jeremiah dijo antes. No entendía por qué él querría lastimar a su pequeña señorita de la familia Shaw.

¿Por qué él la lastimó? ¿Era solo porque él era Nébula? ¿La habría lastimado solo por ser Nébula?

Parecía que Nébula la lastimó. Si ese era el caso, él quería dejar de ser Nébula. Solo quería ser Lucas.

Aunque, se mostró reacio a convertirse en Lucas nuevamente. Después de todo, él era Nébula. Nunca fue Lucas. Nébula era su verdadero yo. Sin embargo, él no la habría lastimado si solo fuera Lucas.

“Nébula, adiós. Espero volver a verte algún día", murmuró.

No estaba seguro de cuánto tiempo había pasado ni de qué hora era.

Cuando Lucas volvió a abrir los ojos, miró fijamente la lámpara incandescente sobre su cabeza. Él se quedó mirando la luz brillante y sus lágrimas rodaron lentamente por sus mejillas.

Él murmuró para sí mismo: “Señorita, lo siento mucho. ¿Por qué viniste aquí?”.

‘¡¿Por qué vino a mi villa solo para dejarme lastimarla?!’.

Eso lo hizo sentir extremadamente culpable.

Él recordó la parte cuando la pateó...

Él sintió como si él la pateara cerca de la región de sus riñones.

Ese lugar...

Lucas cerró los ojos de inmediato.

Noelle tomó el botiquín médico y abrió la puerta del almacén. Ella se acercó y se puso en cuclillas junto a Lucas. Ella preguntó: “¿Sigues vivo?”.