El Amor Eterno romance Capítulo 1690

A continuación, la perspectiva de Zachary de cuando conoció a Caroline.

Zachary ya había escuchado hablar del nombre de Caroline Shaw hace mucho tiempo. Recordaba ese nombre porque su madre se lo había mencionado a Noelle antes.

La primera vez que escuchó ese nombre fue frente a la residencia de su madre. En aquel momento, su madre tomó la mano de Noelle y le dijo en voz baja: "Caroline Shaw es una espina en mi corazón, una que no puedo quitarme ni destruir. No puedo permitir que vuelva a la familia Schick".

Zachary se lo pensó antes de saludar a su madre de forma casual: "Madre".

Su madre se quedó sin palabras, ¡y pareció sorprendida cuando se dio cuenta de que él se había aparecido allí de repente!

A partir de entonces, Zachary comenzó a sospechar de la identidad de Caroline Shaw, y supuso que podría estar relacionada de algún modo con la familia Schick.

...

Cuando Zachary conoció a Caroline por primera vez, no sabía que era la persona que su madre había mencionado.

Después de todo, ella le mintió cuando él le preguntó su nombre.

"Ysabel Shaw", dijo ella.

Al recordar esto, ¡Zachary sintió que era una mentirosa!

Aunque, a decir verdad, Zachary nunca habría imaginado encontrarse con ella en una situación así.

Cuando Zachary la conoció, su enemigo lo estaba persiguiendo después de que había logrado escapar. Acababa de terminar una misión que le había encomendado el jefe de la familia Schick, y sus enemigos estaban arriesgando sus vidas para perseguirlo continuamente. Fue cuando irrumpió por la puerta de una casa de campo cuando vio a la mujer sola.

Estaba en una situación desesperada en ese momento, por lo que Zachary la secuestró sin pensarlo dos veces.

Ella entró en pánico, ¡y siguió luchando y resistiéndose en sus brazos!

Aunque tenía miedo de él, no lo abandonó cuando vio lo malherido que estaba.

En ese momento, Zachary pensó que era una chica amable.

De vuelta en la habitación, Zachary se fijó en la cicatriz de su cara y frunció el ceño. Por alguna razón, balbuceó: "La cicatriz de tu cara se ve fea".

Ella frunció los labios y respondió con su silencio.

Parecía que no le importaba esto. De hecho, parecía que no le importaba Zachary, ¡y que lo miraba con desprecio!

Después de eso, los dos cayeron al río.

Mientras estaban en el río, la chica usó sus dos piernas y las enredó alrededor de su cuerpo. Y no solo eso, sino que lo besó descaradamente.

Aunque el río helado fluía entre ellos, Zachary sintió el beso profundamente. La suavidad de sus labios inundó su corazón al instante.

Se puso furioso. Quería estrangular a la mujer en sus brazos hasta la muerte. De lo contrario, podría dejarla atrás y dejarla morir sola.

Sin embargo, Zachary no hizo nada de eso. En su lugar, se la llevó a su villa en Ciudad Tong.

Ninguna otra mujer había pisado nunca su villa.

Esa noche se convirtió en una de insomnio para Zachary. No dejaba de pensar en el beso, una y otra vez, en su mente...

Era un hombre chapado a la antigua. Nunca se había perdido en los placeres carnales solo por tener poder. Siempre había mantenido su pureza en el amor, y era muy consciente de sí mismo.

En los últimos veintisiete años de su vida, nunca tuvo intimidad física con ninguna mujer. Hubo una vez en la que Emmi le pidió que la abrazara, cuando aún eran muy jóvenes. ¡Pero él nunca accedió ni siquiera a eso!

No es que no sintiera deseos de amor o lujuria, ¡pero sentía que debía ser responsable y considerado de su otra mitad en el futuro!

Se imaginaba cómo sería cuando tuviera una mujer en su vida, pero nunca imaginó que sucedería de la forma en que terminó ocurriendo...

Cuanto más pensaba en ello, más ganas tenía de estrangular a esa atrevida mujer hasta la muerte.

Zachary se sentó en su patio durante toda la noche hasta que salió el sol. Se sentó allí hasta que la mujer finalmente se despertó.

Ella se puso su camisa blanca, se dirigió al balcón y le preguntó con calma: "¿Dónde estamos?".

La mirada de Zachary se detuvo justo en sus largas y rectas piernas que se alargaban bajo la camisa. Fue entonces cuando finalmente se dio cuenta de que era una mujer extraordinariamente encantadora. Nunca había dedicado muchos pensamientos a las mujeres, pero estaba asombrado por su hermosura.

Toda su ira pareció calmarse en ese momento.

Zachary mantuvo su expresión fría y sombría y lo miró fijamente durante un largo rato. Luego dijo: "La villa Schick".

Ella lo examinó con sus ojos rojos y preguntó: "¿En Ciudad Tong?".

Él respondió fríamente: "Sí".

"¿Quién me cambió la ropa?".

Esa chica en serio hablaba demasiado. Zachary no podía soportar lo parlanchina que era en absoluto.

Aunque Caroline solo había hecho dos preguntas hasta ese momento, nadie nunca se había atrevido a hacerle a Zachary una pregunta tan infantil.

"La criada", respondió él.

Después de eso, ella le dio una respuesta corta en un tono vago: "Me voy".