El Amor Eterno romance Capítulo 1740

Eran Chris y Carl.

Ellos estaban parados frente a nosotros justo en medio del camino. Carl se cruzaba de brazos con frialdad mientras Chris corría hacia nosotros después de que Zachary detuviera el coche. Se presionó contra la ventana del coche y dijo: “Finalmente los atrapé a ambos”.

Naturalmente, Zachary lo ignoró.

Él mantuvo una mirada fría, que espantaba a los mirones.

Chris preguntó descaradamente: “¿Adónde irán de viaje? Llévennos con ustedes. Podemos hacer el trabajo pesado”.

El cathysiano de Chris sonaba tan fluido como siempre.

Zachary lo miró con los ojos entrecerrados. “¿Te vas a quitar?”.

Chris inmediatamente levantó ambos brazos y cedió. “De acuerdo”.

Zachary comenzó a conducir de nuevo, pero pudimos ver que el coche de Chris y Carl nos seguía de cerca. Le pregunté a Zachary si Chris causaría algún problema, ya que nos seguían. Zachary dijo que Chris no tenía las agallas para eso.

Chris solía ser obediente frente a Zachary.

Estábamos a la mitad de nuestro viaje, y se hacía más frío a medida que nos acercábamos al norte. Afortunadamente, el calefactor del coche era excelente para mantener el calor. Zachary condujo deliberadamente a una velocidad un poco más rápida para perder a Chris, que iba detrás de nosotros.

Aparte de eso, la mayor parte del tiempo estuve completamente dormida. Unas tres horas después, Yara me contactó.

[Yara: Nuestro coche se descompuso repentinamente. Estamos muy alejados de todo, y no hay muchos coches. ¿Dónde están ahora? Te enviaré nuestra ubicación. Vengan a buscarnos].

Abrí la ubicación de Yara y vi que estaba a trescientos kilómetros de nosotros.

¡¿Qué estaba pasando?!

“¿Acaso tomaron el camino equivocado?”.

Abrí el navegador y descubrí que Yara y Lance habían tomado la ruta equivocada. Nos tomaría al menos cuatro o cinco horas llegar a ellos si nos movíamos de inmediato.

Aunque me sentí impotente, le pregunté a Zachary: “¿Deberíamos ir a buscarlos ahora?”.

Zachary cerró los ojos para reponer energías. Me encontré con Chris nuevamente durante el desvío. Él nos tocó la bocina, pero lo ignoré.

Por la ventana trasera, lo vi darse la vuelta para seguirme.

A Zachary no le importaba su presencia, así que lo traté como si no estuviera allí. Seguí al navegador y conduje hacia la ubicación de Lance y Yara.

Como era de esperar, empezó a nevar a mitad de mi viaje, por lo que ajusté la calefacción del coche.

Tres horas pasaron sin que me diera cuenta.

Zachary se despertó unas tres horas después.

Él se enderezó y me preguntó: “¿Qué hora es?”.

“Las tres de la tarde”.

Zachary revisó el navegador y dijo: “Nos tomará dos horas más llegar hasta ellos. Como máximo, llegaremos después de las cinco y media. Detén el coche y déjame conducir”.