El Amor Eterno romance Capítulo 1803

La puerta de la sala de estudio se abrió desde el interior.

Inmediatamente, Isabelle vio a Cedar allí.

Cedar tenía un rostro frío, indiferente, pero extremadamente hermoso.

Ella inclinó la cabeza mientras examinaba cuidadosamente su buen aspecto. En ese instante, Lucas vino a su mente. ¡La apariencia de Cedar no era para nada inferior a la del Hermano Lucas!

“Hermano mayor, ¿dónde está mi hermano?”.

Cedar dijo en voz baja: “Le surgió algo a último minuto y se fue”.

Isabelle jadeó sorprendida. “¡¿Y por qué Hermano no me lo dijo?!”.

Cedar le lanzó una leve mirada antes de pasar junto a ella, y se dirigió a la sala de estar de la planta baja.

Mientras tanto, Isabelle siguió justo detrás de Cedar mientras pensaba en algo en su mente. ‘¿Por qué Hermano es tan cruel?’.

Cedar de repente dejó de caminar.

Como Isabelle no se dio cuenta de que él se detuvo, se estrelló contra su espalda. Cedar se dio la vuelta y vio a Isabelle frotándose la nariz con una mirada lamentable. Sus grandes y redondos ojos estaban muy húmedos. Desde la perspectiva de Cedar, lo único que notó fue lo linda y hermosa que era.

“Isabelle, Ceri me dijo que te cuidara”, dijo Cedar.

Isabelle sollozo un poco al escuchar eso y dijo sin pensar mucho, “No es necesario. No quiero quitarle tiempo a Hermano Mayor. Regresaré a Ciudad Wu”.

Cedar dijo: “No te preocupes por eso”.

“Olvídalo. Volveré a Ciudad Wu más tarde”, respondió Isabelle.

Como ella ya había decidido regresar a Ciudad Wu, Cedar no insistió en que se quedara. Cedar se dio la vuelta y bajó las escaleras.

Mientras tanto, Isabelle volvió a su habitación. Fue a empacar su equipaje nuevamente, aunque acababa de desempacar sus cosas la noche anterior. Mientras arrastraba su equipaje escaleras abajo, de repente recordó lo que Lucas le dijo antes.

Lucas dijo que su Hermano Mayor era una persona solitaria. Él se fue de casa desde muy joven, y luchó por su carrera en el extranjero. También le recordó que fuera más considerada con él.

Mientras pensaba en eso, le preguntó a Cedar con cariño: “Hermano Mayor, ¿estás ocupado?”.

Él jugó con el anillo en su dedo como solía hacer, y dijo: “Reserva un boleto a Suiza”.

El asistente de Cedar dijo sorprendido: “Pero, Señor Yach, acaba de reservar un boleto para ir a Dinamarca”.

Cedar dijo incuestionablemente: “Sigue mis órdenes”.

El asistente de Cedar no se atrevió a preguntar más, y dijo: “Entendido, Señor Yach”.

…

Cuando Isabelle llegó a los Alpes, fue a esquiar por su cuenta. Luego de aburrirse de eso, encontró un grupo de senderismo al que se podía unir libremente. Isabelle lo encontró interesante, ya que estuvo acompañada durante todo el viaje.

Isabelle siguió al grupo y caminó la mayor parte de las montañas a su alrededor. Sin embargo, comenzó a aburrirse nuevamente al quinto día.

Cedar se alojó en un hotel cerca del pie de las montañas de los Alpes. Estaba ocupado lidiando con su interminable trabajo. Pero cada dos horas, sus hombres le informaban sobre la última actualización de Isabelle.

Él finalmente pudo sentirse a gusto cuando vio que ella estaba sana y salva.