El Amor Eterno romance Capítulo 1877

Isabelle casualmente volvió a decir que lo amaba de manera tan casual y a la ligera.

Cedar cerró los ojos ligeramente para calmar su mente. Isabelle vio el supermercado cuando el coche pasó junto a él. Rápidamente gritó y le dijo al conductor que detuviera el coche.

Ella luego abrió la palma de la mano y le dijo a Cedar: “Dame algo de dinero”.

Cedar abrió los ojos y miró a Isabelle. Ella lo miró ansiosamente con sus ojos límpidos. Luego sacó su billetera y se la dio.

Isabelle la agarró y rápidamente corrió hacia la tienda. Había demasiadas variedades y sabores de caramelos que quería comprar, por lo que no podía decidirse.

No sería un problema si ella terminaba comprando algunos dulces más, ¿verdad?

Cuando Isabelle aún era una niña, Zachary controlaba estrictamente su consumo de dulces y bocadillos. Zachary dejó de controlarla cuando creció, pero Caroline no podía aceptar los hábitos alimenticios de Isabelle. Por eso Caroline se volvió estricta en restringir qué tantos dulces Isabelle podía comer.

Isabelle había sido cautelosa con su antojo por lo dulce y los bocadillos desde que era una niña. Ella no tenía el lujo como otros de simplemente comprar tantos bocadillos como quisieran. Incluso tenía que controlar la cantidad que compraba. De lo contrario, sus padres la habrían regañado. Cedar bien podría hacer lo mismo.

Naturalmente, la última vez que usó la tarjeta de Raphael para comprar bocadillos fue una excepción. Raphael la consintió mucho desde que eran jóvenes. ¡No tenía miedo de que él se enfadara con ella!

“¿Qué sabor debo elegir?”.

Isabelle estaba muy frustrada, cuando de repente escuchó una voz con acento Arbaciano a su lado.

“¡Si te gustan todos, solo toma uno de cada uno!”.

Isabelle se dio la vuelta y vio a una hermosa chica Arbaciana a su lado. Sus rasgos estaban perfectamente definidos con un toque de dulzura. Su cabello largo era de un blanco plateado, y sus ojos eran de un hermoso tono azul. Parecía que sus ojos brillaban.

La chica se parecía a alguien que conocía, pero, ¡¿quién?!

Oh. ¡Se parecía a la protagonista femenina de una película!

¿A quién se parecía? Isabelle recordó de repente la película Crepúsculo. Era igual de bonita que la actriz principal, pero no eran la misma persona.

Tal vez, la belleza era universal.

Isabelle no pudo evitar felicitarla sinceramente.

“Eres tan linda”.

La chica se veía hermosa desde todos los ángulos. Era la chica más bonita que Isabelle jamás había visto.

“¿Eso crees? He recibido muchos elogios anteriormente”, respondió ella.

Isabelle sonrió en respuesta. Luego eligió tres caramelos y salió del mercado.

Cuando volvió al coche, no pudo evitar mirar por la ventana nuevamente. Estaba nevando en Noruega.

El hombre respondió: “Voy a firmar un contrato más tarde”.

“Oh, entonces te acompañaré en silencio más tarde”, dijo Isabelle.

El hombre preguntó suavemente: “¿No te aburrirás?”.

“No me aburro cuando estoy contigo, Hermano Mayor”, respondió Isabelle.

Ella nunca se cansaba de mirar un rostro tan apuesto. Era lo mismo que cuando miraba el hermoso rostro antes. Podría sentarse a verle la cara todo el día si quisiera.

Sin embargo, la cara de su Hermano Mayor le pertenecía solo a ella. Incluso podía besarle la cara de vez en cuando.

Después de salir del aeropuerto, se subieron a un coche y se dirigieron a un complejo en la ciudad.

Cedar entró en la sala de reuniones para firmar su contrato comercial. Mientras tanto, Isabelle se sentó obedientemente fuera de la sala de reuniones y conversó con el asistente de Cedar.

Principalmente, le preguntó sobre la vida diaria de Cedar.

Basándose en sus palabras, Isabelle pudo confirmar que Cedar era una persona sencilla. Solo había tres cosas principales que ocupaban su vida y horario diario.

Comer, dormir e ir trabajar.