Em geral, gosto muito do gênero de histórias como El Amor Eterno, então leio muito o livro. Agora vem Capítulo 200 (2) com muitos detalhes do livro. Não consigo parar de ler! Leia a história de El Amor Eterno Capítulo 200 (2) hoje. ^^
Inicialmente, el plan era quedarme en casa de los Schick durante dos días, pero como sucedió este incidente, Zachary inmediatamente me sacó de la casa. Al llegar a la entrada principal, solo entonces me di cuenta de que el muro que rodeaba la casa entera era realmente largo.
Parecía como si no tuviera fin.
Parecía como una residencia oficial que vemos en esos dramas de televisión.
Zachary no había dicho nada durante el viaje a casa. Cuando estábamos a punto de llegar a la Ciudad Tong, abrí mi boca y expliqué, "No deambulaba por ahí, solo estaba en el vestíbulo. No sabía que me estarían vigilando en la entrada del patio”.
"Mmm".
Solo una palabra y él quedó en silencio.
La expresión de Zachary era tan indiferente como una montaña helada que hacía temblar a los demás. Me había vuelto curiosa y le pregunté, "¿Quién es esa mujer para ti?".
"Ella es la novena concubina de mi papá".
Yo estaba sorprendida y pregunté, "¿Todavía hay concubinas en esta era?".
Zachary respondió brevemente, "Era común en sus tiempos".
Sus tiempos…
De repente pensé en un rey de los apostadores de Ciudad L; tenía cuatro concubinas y cada una de ellas tenía hijos con él.
Obviamente, Zachary no era el único heredero de los Schick.
Ya era de mediodía cuando habíamos regresado a la Ciudad Tong. Zachary me llevó de regreso a mi condominio. Justo cuando estaba a punto de bajarme, él me miró y dijo "Lo siento".
Él parecía haber estado tranquilo y su tono estaba lleno de desagrado.
Estaba asombrada y pregunté, "¿Por qué?".
"Lamento que tuvieras que pasar por ese insulto".
¿Podría ser que Zachary había estado pensando eso en todo el camino?
Sonreí y lo consolé: "No te preocupes, no es tan doloroso".
Después de que el coche de Zachary ya no estaba en mi vista. Regresé a mi condominio. Me senté en el sofá, y seguí pensando en el incidente.
Él insistía en que la novena concubina de su padre se abofeteara ella misma. Él quería que ella sintiera el mismo dolor que yo había sentido, todo para que yo pudiera sentirme un poco mejor.
Él no era capaz de verme sufrir, especialmente cuando fue causado por los Schick.
Luego me toqué la cara y, para ser honesta, no había sido tan doloroso.
Retiré mi mano y me di cuenta de que había una mancha de sangre seca en mis uñas. Estaba confundida en cuanto a dónde había venido.
Parece que accidentalmente había tocado a Zachary cuando yo estaba en su coche…
¡¿Estaba Zachary herido?!
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