El Amor Eterno romance Capítulo 925

Yo tocaba el piano desde que era joven. Debido a esto, solo practiqué la canción dos veces entre bastidores y pude tocar sin mirar la partitura. Estaría interpretando “La Calle Donde Reside El Viento” después de interpretar la pieza de canon.

Lance me dijo que “La Calle Donde Reside El Viento” se convirtió en su especialidad cada vez que realizaba actuaciones musicales. Sin embargo, esperaba que yo pudiera interpretar la canción en su lugar.

Acepté su invitación y dije: “Seguro. Practicaré una vez primero”.

Practiqué “La Calle Donde Reside El Viento” entre bastidores una vez. Antes de que fuera mi turno de actuar, Leo de repente se metió tras bastidores para buscarme.

Informó en voz baja junto a mi oreja: “Jefa, Nébula siguió al asistente Chuck aquí”.

Desde que descubrí que Lucas era el antiguo jefe de Chuck, Chuck se volvió descarado. Incluso llevó abiertamente a Lucas a la sala de música para mi actuación en vivo.

De alguna manera, sentí como si tuviera a un indeciso a mi lado.

“Ignóralos”, le dije a Leo con impotencia.

Lucas ya no estaba relacionado conmigo. Incluso si él aparecía, yo tenía que parecer tranquila como el agua.

La obra musical ya había comenzado. El intérprete principal fue Lance, y la mayoría de la audiencia asistió a la obra por él. Era una obra grupal ese día, por lo que nuestras apariciones serían en la siguiente mitad del programa.

Durante la mitad del programa, finalmente fue mi turno. La apariencia de Lance sería después de la mía.

Me paré debajo del escenario y respire hondo. Cuando estaba a punto de subir al escenario, pude escuchar la voz de Lance junto a mis oídos.

“Pequeña dama, mantén la calma”.

Asentí: “No te preocupes, no te defraudaré. Sin embargo, si realmente cometo un error vergonzoso, ¡no te rías de mí!”.

Yara abrazó el brazo de Lance y sonrió con felicidad.

“No te preocupes. Si te avergüenzas, ¡no me burlare de ti!”.

Le sonreí y le dije: “Voy a subir”.

Subí al escenario con calma. El foco brilló sobre mí y me siguió todo el camino mientras caminaba hacia el piano. Me senté con gracia frente al piano y con calma preparé ambas manos sobre el piano. En mi mente, ¡me seguía recordando a mí misma que no debía cometer ningún error!

Había aprendido a tocar el piano desde joven. No solo eso, ya había dominado mi forma de tocar hacía mucho tiempo e incluso comencé a enseñar. Además, también reemplacé a Lance y actué en un gran escenario antes.

A pesar de mis experiencias, todavía me sentía nerviosa por alguna razón. Quizás la razón principal fue por el hombre que estaba sentado en la última fila. Ese hombre no era cercano a mí al principio, pero, de alguna manera, estaba vinculado a mí. No solo eso, ese hombre también estuvo enamorado de mí en secreto durante los últimos catorce años.

Me convertí en su fe de la nada. Fue así como comencé a perseguir Lance en ese entonces. ¡Podía entender sus sentimientos!

Lucas debe haber sentido la amargura en su corazón. Debe haber sido tan amargo que se volvió resentido.

En esa instancia, las palabras de Gina de repente resonaron en mi mente. Ella me dijo que no todos necesitan amor para sobrevivir. Que era un lujo hablar de amor en el mundo de los adultos. Sus palabras podrían representar a personas como ella.

Sin embargo, otros vivían por amor y fe. Mientras tuvieran fe, su amor se mantendría.

Lucas era uno de ellos.

Presioné la primera nota con mi dedo delgado y las notas posteriores fluyeron gradualmente mientras interpretaba la pieza, me sumergí en mi mundo y recordé las palabras que Lucas me dijo.

Algunas personas no nacieron para disfrutar del mundo. Desde el principio, él ya se había aislado de la felicidad.

Lentamente, cerré los ojos y toqué la pieza con pasión. Mi primera pieza de interpretación terminó rápidamente. Exhalé y respire hondo antes de interpretar mi segunda pieza: “La Calle Donde Reside El Viento”.

Era una pieza familiar que nunca olvidaré en mi corazón.

Después de terminar de tocar la segunda pieza, me levanté e hice una reverencia frente al escenario. Inmediatamente después, bajé al escenario. En el momento que llegué tras bastidores, Yara me llenó de cumplidos.

“¡Caroline, eres tan increíble! ¡No cometiste ni un solo error! ¡Estoy tan impresionada con tu interpretación!”.