El Amor Eterno romance Capítulo 933

La vi escapar, pero no la perseguí. En cambio, le indiqué a Leo: "Síguela. No dejes que esté en peligro".

“Entendido, jefa”.

Cuando los dos hombres escucharon nuestra voz, su conversación se detuvo bruscamente. Empujé la puerta y entré.

Les dije a ellos con franqueza: "Summer escuchó tu conversación. ¿Por qué ustedes dos siempre están hablando de este asunto?".

La expresión de Charles se volvió fría al escucharme. Preguntó: "¿Confías en Stefan?".

Asentí ante su pregunta, pero negué con la cabeza de inmediato. Dije: "No lo sé todo, pero mi instinto de mujer me decía que Blueson no haría nada que entristeciera a Summer. Después de todo, es sincero con Summer".

Charles frunció el ceño y se quedó en silencio.

Me acerqué y pregunté: “¿Podrías repetirme en dónde te heriste?”.

“Él tiene unas nuevas heridas en la cintura”, respondió Zachary.

Charles ni siquiera se había recuperado de su antigua herida, y volvió a herirse.

Pregunté: “¿También se hirió Blueson?”.

"¿Podría ganar contra mí fácilmente?", preguntó en respuesta Charles.

Parecía que ambos quedaron en una situación donde nadie ganó. Sin embargo, lo más importante en ese momento era lo que pensaba Summer.

En efecto, ella tenía un malentendido con Blueson. Era un asunto complicado, y Summer sólo podía resolverlo ella misma. En cierto modo, supuse que ella iba a interrogar a Blueson.

Zachary y yo no nos quedamos mucho tiempo en el hospital. Antes de irnos, Charles recordó: "El viento ha empezado a soplar en Ciudad Ron".

Ciudad Ron…

Antes vi los documentos sobre la familia Jones de Ciudad Ron. Zachary ya me lo había explicado.

Parecía que no podíamos evitar la crisis con facilidad.

“Está bien”, le respondió Zachary a Charles.

"Entonces iré a preparar el almuerzo", respondí.

Me levanté y dejé a Bella en el suelo. Luego, fui a la cocina.

Elaine me siguió y me preguntó: "¿Puedo ayudar en algo?".

"Ayúdame a cocer un poco de arroz", le pedí.

Casualmente, Yara me llamó después de que dije eso. Me dijo que Lance no estaba en casa y que quería ir a mi casa a comer. Naturalmente, le di la bienvenida.

"Bien. Ten cuidado en tu camino hacia aquí".

Después de eso, colgué y me puse a preparar el almuerzo. Cuando casi había terminado de preparar el almuerzo, Yara finalmente llegó. Le di la porción que había dejado para ella.

Volví a mi habitación del piso de arriba para buscar a Zachary. Cuando entré en la habitación, lo vi navegando en mi ordenador portátil.

Le pregunté desconcertada: "¿Por qué estás en mi portátil?".