El Amor Eterno romance Capítulo 992

Zachary me quitó el teléfono de las manos. Le vi escribir las palabras: “Señora Schick, tu belleza rivaliza con la del atardecer, tan encantadora y suave”.

Zachary puede ser impresionante cuando se pone de humor.

Presionó el botón de envío y me pasó el teléfono. Lo recibí y apoyé las piernas en él. Entonces le pregunté: “¿Cómodo?”.

“¿Estás hablando sobre el baño?”.

“Sí. ¿Te sientes cómodo ahora?”.

Zachary frunció los labios: “Sí”.

Las velas ardían desde hacía varios minutos y empezaban a desprender su aroma. Estiré las piernas en los pliegues de su túnica para entrar en calor y pregunté: “¿Hace frío?”.

“¿No sientes calor en el verano?”.

En ese momento, Zachary parecía haber perdido su toque de romanticismo.

Me acosté en el sofá y dije: “Estoy aburrida”.

Me lanzó una mirada de reojo: “¿Deberíamos hacer algo?”.

Lo malentendí de inmediato y dije: “¿No estás agotado de hacerlo a diario?”.

“Estoy hablando de hacer algo divertido y emocionante. ¿En qué estabas pensando?”.

Me quedé sin palabras.

Aprendió a burlarse de mí.

No me molesté en entretenerlo y me conecté a su WeChat usando su teléfono. Había más de veinte notificaciones. Sentí curiosidad y las revisé. Justo cuando entré, vi el mensaje: [¿Está Zachary presumiendo su vida amorosa?].

Vi que era de Martti.

Martti era uno de los pocos que se dirigía a Zachary por su nombre.

A Yara, Eason, el asistente Yair, Evanesce, Stefan y los demás les gustó la publicación. Había algunos otros que no conocía.

Debían ser los amigos de Zachary en Europa.

No le pregunté al respecto y cerré la sesión de sus momentos en WeChat.

Hubo un mensaje en el chat grupal.

Vi que era un mensaje de Joshua.

[Joshua: El segundo hermano está mostrando su afecto en público].

Junto a eso había un emoji con lágrimas de risa.

En el pasado, nunca se habría puesto un brazalete. Fue después de casarnos que sacó su preciado par de brazaletes, uno para cada uno de nosotros.

Estiré la mano para colocar los dos brazaletes uno al lado del otro. Entonces me reí y dije: “Segundo hermano, mi muñeca es más bonita que la tuya”.

Zachary bajo la mirada: “Es normal”.

Su piel era de color marrón claro. Solo la palma de su mano parecía tener un tono de piel más claro. Cualquiera que tuviera una afición por las palmas de las manos habría amado sus palmas.

No pude resistirme y bajé la cabeza para darle un mordisco: “Pero tus dedos son tan hermosos”.

A Zachary no le importaba que le mordiera. Justo cuando estaba a punto de molestarle más, su teléfono sonó de repente. Mis ojos agudos vieron que era una llamada de Charles. Él frunció el ceño y respondió la llamada: “¿Qué quieres?”.

“Zachary, ¿está esa p*rra loca de LG en Ciudad Wu?”.

¡Charles llamó a LG una p*rra loca!

Zachary frunció el ceño y respondió: “Sí”.

“¿Y tú? ¿Dónde estás?”.

Zachary dijo: “Estoy en mi luna de miel”.

“¿Es el lugar que publicaste en tus momentos de WeChat?”.