El Esposo Piadoso romance Capítulo 214

Brandon estaba furioso y completamente humillado. Llamó a Dax, exigiendo que se disculpara y lo compensara por el incidente.

“Vete a la m*erda”, escupió Dax. Fue todo lo que dijo antes de finalizar la llamada.

Brandon nunca había sido maldecido de esa manera, especialmente en su estado actual. Estaba furioso, jurando que se vengaría.

Luego, escuchó que Nancy Lee era la hermosa esposa de Dax.

Brandon estaba lleno de lujuria. Planeaba acostarse con la esposa de Dax como venganza.

Los hombres de Brandon habían estado siguiendo a Nancy la semana pasada. Finalmente envió a unos 10 hombres corpulentos para secuestrarla ese día.

Nancy perdió toda esperanza cuando nadie en las calles se atrevió a dar un paso adelante. No esperaba que Darryl apareciera en lo absoluto.

Sin embargo, dudaba que Darryl pudiera derrotarlos. ¡Incluso podría perder la vida si se involucraba!

“¡Darryl, vete! ¡Encuentra a Dax!”, Nancy gritó asustada, pisando fuerte con frustración.

Darryl se acercó a ellos apresuradamente sin ninguna intención de retirarse.

La mujer de su hermano estaba en problemas. Nunca podría llamarse a sí mismo un hombre si optara por ignorarlo.

“Sinvergüenza, ¿quieres morir?”.

El hombre calvo que lideraba a los hombres corpulentos tenía una cicatriz prominente en su cabeza. Señaló a Darryl con su dedo, mirándolo de forma intimidante.

Cientos de transeúntes llenaron el área, pero nadie se atrevió a involucrarse.

“No me importa quién eres. Te daré dos minutos para que te pierdas de mi vista”, gruñó Darryl.

No les iba a permitir que se llevaran a Nancy, no importa qué.

Esos tipos obviamente no eran buenas personas. Definitivamente profanarían a Nancy si se la llevaran.

“¿Estás jodidamente loco? ¿Por qué te involucras en nuestro asunto? ¡Chicos, acaben con él!”. El hombre calvo arqueó una ceja amenazadoramente.

Los hombres corpulentos soltaron a Nancy de su agarre y rodearon a Darryl en un instante. ¡Movieron sus brazos y revelaron los tubos de acero escondidos en sus mangas!

“¡Darryl, no seas precipitado! ¡Escúchame, ve a buscar a Dax!”. Nancy estaba ansiosa, sudando profusamente. Pisoteó con sus tacones y empujó a Darryl, su hermoso rostro lleno de preocupación.

“¡Vete! Estás superado en número; no vas a ganar. ¡Ve, solo vete!”.

Darryl la agarró del brazo y tiró de ella hacia su espalda, “Deja de hablar, quédate detrás de mí”.

“Tú...!”.

Nancy se mordió el labio mientras sentía una oleada de emociones agitándose dentro de ella.

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