El hombre con la máscara de zorro romance Capítulo 307

La mujer miró a su alrededor, luego dio dos vueltas con sus tacones altos alrededor del Bentley que había salido y su delicado rostro mostraba mucha impaciencia.

-¿Cómo va? Mi entrevista está a punto de comenzar, ¿no dices que es un Bentley? ¿Por qué me falla en este momento?-

Un hombre de mediana edad se asomó desde el coche, parecía que estaba disculpándose de la mujer, pero si se fijaba con más detalle se captaría el desprecio oculto en sus ojos.

-Lo siento mucho, señorita Jennifer. No era nuestra intención, pero el coche falló de repente en este momento. Si quiere puede esperar un rato en el coche, el jefe ya está buscando soluciones.-

-¿Esperar un rato? ¿Cómo voy a esperar? ¿De dónde saco el tiempo? Cuando pedí que me llevarais en coche, ya estabais buscando excusas, ¿de verdad crees que no sé vuestras ideas? Te digo, por muy insoportable que sea, soy vuestra jefa. ¡Ten cuidado conmigo o le diré al jefe para que te despida!-

-Sí, sí, sí.-

El hombre asintió de buena manera, -Señorita, todo lo que dice es correcto, lo corregiré. Por supuesto, usted es una persona tan generosa que seguro que puede perdonar mis errores.

La mujer se burló y no dijo nada más.

Justo el coche de Laura estaba bloqueado en esa intersección de semáforos, por lo que ella y el conductor escucharon toda la conversación de aquellas dos personas.

El coche del hombre aún no había sido reparado durante el atasco, la mujer no paraba de mirar la hora y veía que quedaba cada vez menos tiempo para la audición.

Finalmente, la hermosa mujer no pudo soportar más, miró al hombre con enojo que aún estaba reparando el coche y pisó sus tacones dando pasos grandes hacia la dirección de Laura.

-Ya no te necesito, puedes seguir reparando el coche aquí, inútil.-

-¡Oye!-

La mujer se inclinó y golpeó vigorosamente la ventana del conductor como si no viera a Laura.

-Llévame a un sitio, tengo mucha prisa y puedo pagar el doble.-

-Esto no es apropiado, señorita.- El conductor miró en el asiento trasero y rechazó decisivamente a la mujer, -Como ve, ya tengo a una pasajera.-

Cuando la mujer escuchó esto, echó un vistazo en el asiento de Laura y luego retiró la mirada sin preocuparse por ella en absoluto.

-Si no, puedo pagar el triple, tengo mucha prisa.-

¿El triple?

Aunque el conductor cumplía con sus reglas, no pudo evitar sentirse conmovido por ese precio, apretó el volante e inconscientemente observó la reacción de Laura a través del espejo retrovisor.

Justo cuando el semáforo en rojo estaba a punto de cambiar, Laura miró el teléfono y vio que aún tenía tiempo, por lo que podía llevar primero a esa señorita.

Pensando en esto, ella habló directamente, -Que se suba esta señorita, no tengo mucha prisa, así que puedes llevarla allí primero.-

Cuando el conductor escuchó esto, inmediatamente miró a Laura agradecido y dijo, -¡Genial!-

La mujer andaba con amaneramiento hacia el coche y se sentó en el asiento copiloto. Ella levantó los ojos y miró mal a Laura, no tenía ninguna intención de agradecer a ella.

A Laura no le importó cuando lo vio, porque no quería causar problemas. Se agachó la cabeza para seguir mirando su móvil y de paso leyó los comentarios sinceros de los lectores de la aplicación sobre su obra.

Cuando la mujer llegó al destino, Laura se dio cuenta de que las dos iban al mismo lugar.

-Conductor, pare aquí, yo también me bajo.-

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