Realmente, había alguien en esta habitación privada. Escuchó el ruido y fue apresuradamente hacia la puerta, pero no esperaba que hubiera una mujer tirada a la puerta, y fuera alguien que él conocía.
La levantó rápidamente, y la llamó suavemente, al ver que ella estaba inconsciente, sin poder responderlo, miró hacia afuera, y luego miró el estado de Laura, cerró la puerta con decisión.
Esta persona no era nadie más que Ichiro Matsuda, quien había visto a Laura una vez, y le tenía una buena impresión.
Se puso de pie, la puso horizontalmente, la levantó y la puso al borde de la cama, todo el proceso fue suave y gentil, como si no estuviera sosteniendo a una persona, sino a un tesoro raro.
Después de haber puesto a Laura bien, Ichiro Matsuda giró la cabeza y miró hacia la puerta, trataba de confirmar lo que estaba pasando.
En ese momento, sonó un repentino y violento golpe en la puerta, él frunció el ceño, se acercó y abrió la puerta levemente.
-Hola, aquí es un espacio privado, ¿pasa algo?
El que estaba fuera de la puerta era el hombre que amenazó a Laura hacía un momento.
En el momento en que el hombre vio a Ichiro Matsuda, sabía que aunque este hombre frente a él se veía como un caballero, no se podía provocarlo.
Después de pensarlo bien, ese tipo quiso mirar dentro de la habitación a través del espacio de la cadena antirrobo, pero Ichiro Matsuda lo bloqueó.
El hombre no pudo ver nada, inmediatamente le mostró una sonrisa, comenzó a explicarle cortésmente,
-Disculpe por haberlo molestado, le quiero preguntar ¿si ha visto a una mujer que irrumpió aquí hace un momento?
-¿Una mujer?
Ichiro frunció el ceño,
-¿Qué mujer? No he visto nada, ¿y quién es esa mujer para ti? Si es tu amiga, puedo ayudarte a llamar al guardia de seguridad.
-Ay, n hace falta, no pasa nada.
El hombre asqueroso estaba tan asustado que agitó su mano rápidamente, las comisuras de su boca se elevaron aún más, y mostró una sonrisa halagadora a Ichiro, y comenzó a explicarle apresuradamente.
-No, no, tuvimos una pelea mi novia y yo, por eso se escondió a propósito, quería que la buscara yo. Disculpe por haberlo molestado, realmente lo siento.
-No pasa nada.
Ichiro levantó la mano y empujó las gafas doradas en su rostro, su expresión era extremadamente fría.
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