El Hombre que Robó Mi Corazón romance Capítulo 49

Después de dejar las oficinas de Secret, Tangning encontró el auto de Han Ruoxue estacionado afuera. Sus ojos se encontraron, pero no dijeron nada. Mientras pasaban la una frente a la otra, Han Ruoxue dijo a Tangning:

—El día en que se publique la revista Secret es el día en que dejarás la industria del modelaje.

—Parece que tienes mucha fe en Mo Yurou.

—Aunque no ha tenido tanta exposición como tú, ya tiene experiencia internacional y ha ganado puntos extra por parte de los jueces de los Premios A Las Diez Mejores Supermodelos. En comparación, tú has perdido todo valor —dijo Han Ruoxue sin piedad.

—¿De verdad? Entonces esperemos los resultados... — respondió con calma, sin sorprenderse en absoluto,cuando sus palabras eran fuertes, nada oscuro en la industria del entretenimiento la iba a aplastar.

Han Ruoxue miró a Tangning llena de odio: su deseo de destruir a Tangning era cada vez más fuerte. Una artista que no podía ser controlada, ya sea atada o libre, siempre representaba un peligro oculto. Solo cuando ella la pisoteara y se asegurara de que no pudiera volver a levantarse, se sentiría completamente tranquila. ¡Especialmente dado que Tangning tenía un odio tan fuerte hacia ella y su hermano!

—Tangning, hay algo extraño en la expresión de Han Ruoxue —comentó Long Jie, quien se volvió para mirar a

Han Ruoxue. Se sintió un poco preocupada.

—En este momento, ella quiere aplastarme con todas sus fuerzas —repuso Tangning. Ella entendía lo mucho que los hermanos Han la odiaban. —Si realmente fallo con la revista esta vez, puedo imaginar el futuro sombrío que tendré.

—No sucederá... Lin Wei y yo tenemos fe en ti. Además, incluso si fallas, no importa, ¡aún tienes a Gran Jefe!

Hablando de Mo Ting, Tangning recordó que Mo Ting había dicho que vendría a buscarla. Entonces, después de alejarse un poco de Secret, ella levantó su teléfono para llamarlo. Al otro lado de la línea, Mo Ting rió cuando le dijo que diera la vuelta. A la vuelta de la esquina, una limusina Lincoln estaba estacionada debajo de un árbol.

Un hombre alto se apoyaba en el auto, su cuerpo en forma se acentuaba con el traje clásico a rayas blancas y negras que llevaba puesto. No tenía una sonrisa en su rostro, pero los contornos de su rostro eran suaves. El lunar en su oreja derecha era deslumbrante. Tangning lo miró estupefacta. Este hombre parecido a un emperador debería estar rodeado por un ejército de personas. Pero por ella, él estaba dispuesto a pararse solo en este rincón tranquilo.

Los ojos de Tangning comenzaron a hincharse; el incidente anterior había desaparecido en el fondo de su mente. Ella era una modelo, pero también era la esposa de este hombre.

Desde el día en que se casaron, este hombre había estado aceptando sus fallas y había estado cumpliendo todos sus deseos. ¿Continuaría haciendo esperar al sol porque todavía estaba concentrada en una estrella caída?

¡No valía la pena!

—¿Qué pasa? —preguntó suavemente; notó que Tangning parecía un poco deprimida.

Tangning sacudió la cabeza sin decir una palabra.

Las palabras "Me gustas" colgaron en la parte posterior de su garganta.

—¿Es porque estás muy cansada por la sesión de la revista? — preguntó Mo Ting mirándola de arriba abajo. Notó los cortes en sus piernas mientras sus pupilas se dilataban de ira. —¿Qué pasó?

Long Jie estaba a punto de explicar cuando Tangning intervino. — Mo Ting, vámonos a casa, tengo algo que decirte.

Mo Ting miró a Long Jie, era obvio lo que había sucedido. Esta deuda la iban a pagar, pero no todavía.

Después, todos abordaron la limusina. Sin embargo, durante todo el trayecto, Tangning estaba nerviosa y silenciosa.

Mo Ting no la interrogó. Cuando finalmente llegaron a la mansión, la llevó en brazos directamente al dormitorio. Ahora, estaban solo ellos dos. Mo Ting colocó a Tangning sobre la cama y ordenó a las criadas que trajeran la caja de medicinas.

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