El Juego de los Exes romance Capítulo 138

Después de responder ese mensaje, sabía que Sebastián probablemente no le respondería. Por eso, usó su cuenta de trabajo para enviarle otro mensaje.

[Sr. Sagel, ¿la compensación se depositará directamente en tu cuenta? Dame tu número de tarjeta bancaria, por favor. ]

Gabriela acababa de pedir prestado dinero, y ahora tenía que usarlo para pagar una deuda, pero no se sentía culpable en absoluto.

Al ver ese mensaje, Sebastián frunció el ceño, ¿de dónde sacó tanto dinero?

¿No siguen ella y su esposo alquilando una casa?

El coche dañado puede ser cubierto por el seguro, le pidió a Olivia que compensara solo para causarle problemas.

Ahora que Gabriela asume voluntariamente la responsabilidad de la compensación, Sebastián nunca pensó realmente en hacerle pagar ocho millones de dólares.

Sin embargo, se rio para sus adentros ante su comportamiento de asumir todas las cosas sobre ella.

Justo cuando iba a responder su mensaje, Fabio llamó para preguntarle si quería ir a tomar una cerveza.

Sebastián agarró su abrigo y salió en coche hacia el bar. Esta noche, Gabriela había venido al bar para pedirle dinero prestado a Lucía, y ahora que el problema estaba resuelto, empezó a pensar en la casa de Sebastián, ya que el equipo de construcción aún no lo había encontrado. Por suerte, Lucía dijo que iba a reunirse con Ariel Lira y se fue después de la llamada.

Gabriela no tenía intención de quedarse mucho tiempo, justo cuando estaba a punto de irse, alguien le tocó suavemente el hombro.

"Penny, qué casualidad."

Al oír esa voz, Gabriela se dio la vuelta y vio a Sergio.

Sergio todavía tenía su aspecto casual de siempre.

"¿Oí que te peleaste con Carlos?"

"Sr. Lira, ¿realmente quieres preguntar eso?"

Sergio sonrió suavemente y miró a su alrededor.

Esta es la zona de mesas, el ambiente es bastante ruidoso.

"¿Vienes conmigo al privado? Quizás tengamos algunas cosas de que hablar."

Sergio obviamente todavía quería a Gabriela, pero teniendo en cuenta que ella es la esposa de Sebastián, no se atrevió a hacer movimientos apresurados.

Gabriela ya había aclarado su relación con él, por lo que confiaba en que Sergio no se pasaría de la raya, así que asintió en señal de acuerdo.

Realmente quería hablar con Sergio sobre el tema del equipo de construcción.

Pero cuando entró al privado y vio a las personas que estaban ahí, se sintió muy irritada.

Sabía que a Sergio le gustaba causar problemas.

En el privado estaba Sebastián, también Fabio, y algunos otros famosos de la sociedad.

Cuando Gabriela entró, los ojos de Fabio ya estaban como platos y luego sonrió a todos.

"¿Seguimos con el juego de antes?"

Tenía en la mano una botella de vino tinto sin abrir que colocó en el centro de la mesa.

Alguien habló, "Sigue jugando, ¿por qué no? Los que trajeron a sus novias, tengan cuidado, Sergio y Fabio son buenos creando problemas."

Sergio ya era un casanova, por lo que era muy bueno en este tipo de juegos. Fabio, como guionista, era particularmente bueno creando temas entre hombres y mujeres.

Casi todos los ricos en el lugar habían traído a una acompañante, y también había chicas ricas como Mencía que habían venido a jugar solas. Cada uno con sus propias intenciones, el ambiente se volvió de repente ambiguo.

En tales ocasiones, Sebastián normalmente no participaba, se mantenía en silencio como un espectador, reclinándose hacia atrás.

Pero Fabio le dio una palmada en el hombro y se rio al presentarlo.

"Ah sí, Penny es la diseñadora de interiores de Sebas."

Al escuchar esto, Mencía mostró desdén.

Fabio no se sintió incómodo por esto, "Sebas, juguemos juntos, siempre te abstienes, qué aburrido."

Sebastián tiró su teléfono a un lado y dijo relajadamente, "Vale."