El Juego de los Exes romance Capítulo 21

Gabriela se encontraba disfrutando de una limonada cuando casi se atora al escuchar eso. Sabía lo que significaba, pero no podía permitirse caer en esa trampa. Tomó una servilleta y se limpió la boca con calma.

"Lo sé, ¿y qué?", parecía no importarle el matrimonio de Sebastián. Esta actitud hizo que Sebastián levantara ligeramente la mirada.

Sandy se esforzaba al máximo, pero se sentía como si estuviera golpeando algodón. ¿Y qué? ¿Qué más hay que decir? ¿Acaso su insinuación no era lo suficientemente clara? Esta mujer realmente sabía controlar sus emociones, ¿debería decir que era paciente o ya se había ganado el favor de Sebastián y por eso se volvía arrogante?

Sandy estaba molesta, pero no podía permitirse parecer desesperada para no perder la ventaja. Miró a Sebastián con una expresión tranquila.

"Sebas, no has vuelto en tres años, tal vez no sepas que este restaurante tiene un nuevo chef. El chef actual regresó de Nueva Zelanda después de estudiar allí, y hay un plato que seguramente te gustará", dijo mientras tomaba el menú, claramente considerándolo su territorio.

La cara de Sebastián permaneció tranquila, sin ninguna expresión adicional. No rechazó ni respondió a su propuesta.

Algunas personas pueden parecer frías pero son muy astutas, tratar con ese tipo de personas es difícil. ¿Evitar que los clientes sean acosados formaba parte de su trabajo?

Al pensar en esto, Gabriela sonrió ligeramente, "Los platos que Bell hace mejor no están en el menú, y hoy invito a Sr. Sagel a comer. Si tú también quieres invitar a Sr. Sagel, puedes elegir otro momento".

Sus palabras fueron directas, incluso con la cara de Sandy más gruesa, era difícil quedarse después de eso.

Cuando se levantó, le echó una mirada profunda a la sonrisa de Gabriela. Se miraron sin palabras, como si ya hubieran tenido un enfrentamiento.

Sandy apretó su bolso con fuerza, casi rompiendo el cuero de cocodrilo. ¿Cómo se atreve una simple diseñadora de interiores a ser tan arrogante? se aseguraría de recordarla.

"Fui imprudente, Sebas. La próxima vez que tengas tiempo, nos veremos", dijo Sandy mientras levantaba una ceja. Antes era difícil deshacerse de Sandy, pero hoy se fue tan rápido. Sus labios se curvaron ligeramente y respondió indiferentemente.

Gabriela sintió que su rostro se calentaba, tal vez tenía fiebre, su visión empezó a nublarse, "El plato especial de Bel es muy artístico, creo que al Sr. Sagel le gustará.

Inmediatamente, Sebastián lo entendió. Ella realmente quería invitarlo a comer, pero también quería conocer sus gustos para comprender sus preferencias. En todas partes hay oportunidades de negocio. Sintió cierta insatisfacción en su interior.

"Señorita Penny, usted está trabajando muy duro, ¿qué hace su marido?"

Gabriela se quedó un poco atónita, levantó la vista hacia Sebastián, se veía sorprendentemente atractiva.

La mirada de Sebastián se volvió más profunda, "Un buen hombre no debería dejar que su mujer trabaje tan duro."

Ella no esperaba que Sebastián mencionara su matrimonio, Gabriela apretó los labios y tomó un sorbo de agua para calmar su malestar. ¿Cómo debería responder?