Ya no había vuelta atrás, Shawn no podía revertir las cosas. Si seguía allí, solo recibiría más humillaciones. Así que recogió el contrato del suelo, agachó la cabeza y se marchó.
El jefe, por detrás suyo, llamó a Nancy para felicitarla por haber alcanzado su objetivo.
Al salir de la oficina, el hombre echó un vistazo alrededor.
Había muchos novatos en la empresa, así como algunas estrellas muy conocidas. Él había ganado mucha popularidad recientemente, su fama había crecido rápidamente y todos lo trataban con amabilidad.
Pero cuando entró en la oficina y cerró la puerta, perdió todo su estatus.
Ahora tenía que ir a acompañar a Nancy.
Pensando en los métodos de esa mujer, sintió miedo.
Pero no podía hacer nada, el contrato era la atadura de ellos, los artistas.
Su mirada estaba llena de desesperación.
Una vez en el coche, incluso pensó en quitarse la vida y revelar todas las cosas repugnantes que ella había hecho justo antes de morir. Después de todo, ahora era famoso.
Su agente, que estaba a su lado, trató de consolarlo.
"Shawn, no pienses en hacer tonterías. Siempre hay una solución."
El agente había estado con él durante varios años y sabía que era una persona fuerte.
Nancy tenía una mala reputación en el negocio. Anteriormente, un joven actor que apenas estaba empezando a ser famoso fue encontrado muerto en su habitación. No fue por el estrés que se suicidó, sino porque ella lo había destrozado y él no pudo aceptarlo.
Él pensó que su futuro sería el mismo.
Ella siempre lo había estado acechando. Si ella lo conseguía, no sabía cómo lo torturaría.
"Shawn, ¿por qué no intentas de nuevo con la Srta. Vargas? Es mejor acompañarla a ella que a Nancy."
El joven suspiró, miró por la ventana, pero lo que se le venía a la mente era la cara de Gabriela.
Si sólo ella estuviera dispuesta. De hecho, desde la primera vez que se encontraron, le gustó un poco.
Pero ella no quiso.
Al anochecer, Gabriela decidió ir al Bar Galería del Cielo.
Fabio era una persona a la que le gustaba la diversión. A menos que tuviera un guion para filmar, pasaba la mayor parte del tiempo en el Bar Galería del Cielo tomando cerveza.
La mujer se acercó a la sala VIP donde solían ir esos niños ricos, golpeó la puerta y la abrió.
Para su sorpresa, vio a Fabio en el karaoke besándose con una mujer, mientras en la pantalla se reproducía una película erótica.
La escena la dejó paralizada, sus ojos se encontraron con los de la mujer.


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