El pacto de los trillizos romance Capítulo 21

Jean dirigió una mirada a Neera y le dijo a Harvey:

—Claro, pero... ¿estás seguro de que las habilidades de tu madre valen cinco millones de dólares?

«¿Está cuestionando mis habilidades?», pensó Neera.

—¡Si mis aptitudes no valieran tanto, aún estarías en cama inconsciente y tu equipo médico seguiría esforzándose por salvarte!

—Pareces muy segura de ti misma —dijo Jean con una sonrisa burlona. Aunque tenía que admitir que era sumamente hábil, desconocía los límites de sus habilidades, por eso tenía sus dudas.

Neera percibió que no le creía. Frunció el ceño y dijo:

—Solo necesito diez sesiones. Eso le ahorrará a tu equipo médico un año de esfuerzo.

Jean estrechó la mirada. La mujer frente a él irradiaba una confianza total, sin rastro de presunción.

—¿Está segura, Doctora? ¿Puede estar tan seguro de tratar al señor? —Ni siquiera Ian lo creía. Recordó que el equipo de Joanna no mostraba progreso y que la Doctora Nancy había cancelado su cita. Si la mujer frente a ellos tuviera una manera de curar la enfermedad de su jefe, no quería perder la oportunidad. Estaba dispuesto a gastar lo que fuera para prolongar la vida de Jean.

Neera respondió:

—Por supuesto, todo es discutible en este momento. Podrás ver los resultados después de diez sesiones y juzgar si estoy presumiendo. Por supuesto, si no me crees, ¡puedes regresar a tu equipo médico! Encontraré otra forma de conseguir los cinco millones de dólares.

Los trillizos no iban a permitirlo. Intentaron convencer a Jean:

—Señor Atractivo, ¡cinco millones de dólares es una verdadera ganga! Los demás ni siquiera tienen la oportunidad de conocer a mamá.

—Exacto. Las habilidades de mamá van más allá de la consulta y el diagnóstico. ¡La medicina que desarrolla es invaluable! ¡La única razón por la que te recuperaste tan rápido es porque tomaste una de sus píldoras!

Jean desconocía eso.

—¿Medicina? —preguntó.

Ian recordó el incidente en el hotel esa misma mañana:

—¿La pastilla? ¿No era solo una aspirina?

—¡Por supuesto que no! —dijo Penny—: Mamá inventó esa medicina, y es muy costosa...

Neera interrumpió a su hija antes de que revelara más detalles. «¿Por qué contaron todo? No quiero que me descubran», pensó.