El Prohibido Amor de un CEO romance Capítulo 228

Encerrado en sus pensamientos, en completo silencio, Edward fija sus ojos en un punto lejano mientras permanece frente a su amplio ventanal en su oficina.

Por mas que intenta estar concentrado en su trabajo pues incluso su abuela se lo pidio expresamente esta mañana, la verdad es que Edward no tiene cabeza para pensar en nada mas que en la delicada y fragil salud de la gran matriarca Situ.

Si bien antes Edward de verdad llego a odiar a su abuela y desear que magicamente "desapareciera" e incluso quiso pasar por encima de su autoridad...

En este momento que ha pasado por tanto, tantas perdidas y situaciones adversas...

Y que valora el amor de su esposa, la lealtad y amistad de sus amigos con los cuales ha formado una fuerte y unida familia, la cual se une todavia mas por la vida preciosa e invaluable de su nena y los bebes de la familia...

Es en este duro y triste momento en que Edward desearia retroceder el tiempo y valorar mas a su abuela.

Lorelay toca la puerta de la oficina de su amado antes de entrar, lo que ella ve la transporta a un tiempo en que ella vivia atemorizada de Edward.

"Mi amor..."

La bella chica cierra la puerta antes de caminar hacia su esposo y abrazarlo por la espalda.

Suspirando levemente, Edward acaricia las delicadas manos suaves de su esposa antes de darse la vuelta y abrazarla.

Lorelay siempre ha sido quien lo salva de su miseria, siempre le ha dado paz, siempre le ha ayudado a enfrentar sus temores y por ella haria todo, por eso es que ahora la necesita mas que nunca.

"Estoy bien mi amor es solo que..."

Edward detiene sus palabras porque su celular suena en ese momento.

La bella chica puede ver cuando la cara y actitud de su esposo cambia radicalmente y por ello sabe que algo malo esta por ocurrir.

"La abuela nos necesita en su villa, debemos ir de inmediato."

Sin perder mas tiempo, Edward toma la mano de su esposa para salir del edificio lo antes posible.

Manejando deprisa, Edward intuye que se acerca la despedida final de su abuela y eso hace sangrar su corazon el cual ahora desearia el apuesto pero preocupado hombre volver a congelar y proteger de este amargo deceso.

La familia entera ya esta reunida en la villa cuando ellos llegan, Emily fue recogida de la guarderia junto con todos los bebes quienes juegan de forma entusiasta en el area de juegos.

Las caras de todos se aprecian serias, preocupadas, incluso resignadas...

"Solo faltan ustedes por verla."

Comenta Maggie hacia la pareja cuando los ve llegar.

"Edward..."

Las parejas los rodean, expresando en silencio el dolor que comparten, Edward sonrie un poco de lado, agradecido por este acto de solidaridad antes de caminar escaleras arriba para ir con su abuela.

Thomas y Tim abren la puerta de la habitacion de la matriarca, los dos hacen una reverencia respetuosa antes de salir para dejar a la matriarca con sus nietos.

Recostada contra varias almohadas blancas y grandes, la abuela mira hacia la ventana pues varias aves y mariposas se han posado en el marco mientras un hermoso y dorado rayo de sol ilumina y calienta la majestuosa habitacion.

Sonriendo, la abuela gira su cabeza para recibir a sus nietos quienes se sorprenden al verla rejuvenecida, hermosa y radiante.

"Mis nietos, que bueno que ya estan aqui."

La voz de la abuela se escucha tan fuerte y hermosa, la pareja se acerca a su lado, sentandose en la orilla de la cama.

"Quiero que sepan que amo demasiado a los dos."

"Ustedes son mi orgullo, mi legado, el futuro de nuestra gran y noble familia."

Declara la abuela con voz firme y hermosa mientras toma con sus manos las manos de Edward y Lorelay.

"Han pasado por demasiadas pruebas en su vida, todas les han enseñado lecciones muy importantes y necesarias..."

"Aprendieron a ser fuertes, independientes, a proteger lo mas valioso en su vida..."

"Y sobretodo a apreciar la maravilla de la vida."

Las angelicales y bellas risas de los pequeños se mezclan con los trinares de las aves, el bello ruido se cuela por la ventana entre abierta y llega a los oidos de los tres.

"Nosotras, las abuelas tratamos de enseñarles todo lo que pudimos."

"Intentamos corregir errores muy costosos de nuestra juventud y enseñarles a ustedes a no cometerlos en un futuro."

La abuela aprieta un poco la mano de Edward dandole a entender que él, mas que nadie, no debe volver a ser como antes fue.

Un bastardo hijo de puta de primera, sin sentimientos, vengativo y rencoroso.

"Todo esta arreglado, no tengo ningun asunto sin resolver mas."

"No sufran por mi, nadie es eterno, nada es para siempre, todo debe seguir su camino y es hora de seguir el mio."

Desviando la mirada, la abuela observa entrar a su amiga Freda quien esta rodeada de un hermoso halo de luz plateada.

Lorelay mira la bella esencia de su abuela acercandose, su caracteristica fragancia la envuelve a ella y a Edward quien tambien mira la luz acercandose a su abuela.

"Ellos estan aqui por mi..."

Sonriendo bellamente, la abuela mira cuando Freda se coloca a espaldas de Lorelay, David Mu tambien se coloca al lado de su hija.

Tratando de reprimir las lagrimas que brotan de los ojos de los dos, la pareja aprieta la mano de la abuela quien no parece enferma o en sus ultimos dias en absoluto.

"Amense mucho mis nietos."

"Amen a mi nieta y cuidenla demasiado."

"No se desvien de su camino, promete que no volveras a ese camino oscuro mocoso."

Edward asiente en silencio, Lorelay deja escapar sus lagrimas pues no puede contenerlas por mas tiempo.

"En este hermoso dia se que no podria ser mas feliz porque conoci a mi adorada bisnieta."

"Mis nietos se casaron tal como siempre lo anhele."

"Mi familia se amplió, se fortaleció con su unión y ahora se que en las manos de la siguiente fuerte y valiosa matriarca..."

Lorelay mira a la abuela a traves de sus lagrimas, ella se ve tan saludable que la chica no puede creer que este a punto de abandonar este plano terrenal!

"Mi vida valió cada segundo la pena para ahora verlos unidos por el fuerte lazo del amor."

"Ustedes son todo para mi, ustedes y mi adorada Emily."

Lagrimas de felicidad brotan de los ojos de la abuela quien escucha en el ambiente la mas bella musica que escucho en su juventud.

Una deslumbrante luz blanca comienza como un punto en una esquina de la pared frente a la abuela, pero rapidamente se convierte en un gran portal de luz.

De pronto, un joven apuesto y galante atraviesa ese portal, la abuela cree reconocerlo pues lo conocio hace tiempo, en algun lugar, en su lejana juventud.

"Estare con ustedes todo lo posible..."

"Aunque mi momento ha llegado..."

Los pequeños rien y juegan de la mano de las energias amables de la abuela Freda y el abuelo David quienes les indican que la abuela Situ ahora sera un angel como ellos lo son.

Los pequeños, al ser tan inocentes solo sonrien emocionados al saber que sus abuelos jamas los dejaran solos.

Emily se entristece un poco porque no quiere que la abuela se marche, pero la abuela Freda le susurra en el oido de la bebe hermosas palabras de consuelo.

Sören abraza a su niña cuando ven que las dos figuras de neblina blanca se elevan para entrar por la ventana de la habitacion de la abuela Situ.

Emily abraza con fuerza al alto niño porque sabe que a partir de ahora, su vida sera diferente.

"Veniste..."

Susurra la abuela mirando al guapo joven quien fue su esposo en su vida pasada.

El chico asiente en silencio antes de tenderle la mano blanca y resplandeciente a la abuela.

"Es hora."

Escucha en su mente la abuela, ella comprende que su tiempo alargado en este mundo se ha agotado definitivamente.

"Es mi tiempo mis nietos..."

"Honren nuestra familia."

"Sean muy felices."

"Mocoso...tu..."

Lentamente el agarre de la abuela a las manos de los dos se va relajando.

Edward mira a su abuela quien tiene una sonrisa en sus labios, los ojos cerrados y una actitud tan pacifica que parece que esta solo dormida.

"Abuela?"

Edward cuestiona con la voz temblorosa acariciando la mano de la abuela.

"Abuela..."

"Abuela?"

Lorelay deja escapar un sollozo pequeño antes de cubrir su boca con la mano mientras acaricia delicadamente la mano aun tibia de la abuela.

"Abuela..."

Sintiendo que el corazon se le aprieta de forma dolorosa e irremediable, Edward se levanta para abrazar a su abuela.

"No puedes irte todavia abuela..."

"No puedes dejarme!"

"No abuela, no puedes marcharte!"

Mirando a su esposo rogarle a su abuela, Lorelay se levanta para consolarlo pues sus palabras se escuchan tan adoloridas.

"Despierta por favor abuela, dime que soy un mocoso insufrible!"

"Tu siempre estuviste conmigo, eres como una madre para mi!"

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