El romance del dulce remolino: Señor, ¿le gustaría ser mi pareja en el matrimonio? romance Capítulo 115

Song Anyi hizo un puchero y soltó a Tang Ruochu. Luego la siguió hasta su escritorio. "¿Cómo estuvo el viaje?".

Tang Ruochu puso los ojos en blanco y dijo derrotada, "Tuve que mirar a esas caras irritantes todo el día. ¿Cómo crees que se siente?".

"Eso de hecho no es bueno. Pero comparado con eso, estás en serios problemas".

Song Anyi miró solemnemente a la oficina de Li Na. "Esta mañana, después de que Gu Ruoruo llegara a la oficina, fue a quejarse de ti a Li Na. Dijo que no cumpliste con las órdenes de la compañía, te negaste a cooperar con ella e ignoraste la reputación de la compañía. Esa mujer no es un personaje pequeño. Li Na fue llamada a una reunión por la mañana, y probablemente te está esperando ahora".

"¿Oh, enserio?".

La expresión de Tang Ruochu no estaba muy sorprendida. Parecía haber adivinado que Gu Ruoruo haría eso.

Frunció la boca y una sonrisa fría se formó en la comisura de sus labios. "Entonces debería ir a buscar a Li Na. Estoy interesada en ver cómo la compañía va a continuar a reponer los límites".

Después de una simple charla con Song Anyi, Tang Ruochu se levantó y fue a la oficina de la gerenta a buscar a Li Na.

"¿Ya llegaste?".

Al ver a Tang Ruochu, Li Na dejó el trabajo que estaba en su mano. Su usual expresión fría ahora estaba mucho más suave.

“Si”.

Tang Ruochu asintió. Sin esperar a que Li Na tomara la iniciativa, se abrió con franqueza. "Gerenta, ya escuché lo que sucedió. ¿Cómo quiere la gerencia lidiar con esto?"

Li Na estaba sorprendida. No esperaba que ella fuera tan directa y franca. Sólo recupero la calma después de un breve momento y luego dijo serenamente, "He reprimido la ira de ellos por ahora. Sabes, yo no creo en escuchar solo un lado de una historia. Además, si realmente tengo que hacerlo, estaré más dispuesta a confiar en ti que en Gu Ruoruo. Después de todo, ¡he sido tu supervisora durante dos años!”.

"Gracias, Gerenta".

Después de pensar por un breve momento, Tang Ruochu de repente le dijo a Li Na, "Gerenta, hagamos lo que quiere la compañía. Puedo aclarar este asunto al público".

Después de decir esas palabras, incluso la calmada Li Na no pudo evitar mirarla en estado de shock. "¿Qué dijiste? Xiao Tang, ¿sabes que una vez que hables al respecto, toda la culpa será puesta en ti?".

"Lo sé".

"Entonces, ¿por qué ...?".

"Está bien, Gerenta. ¡Tengo un plan! Además, gracias por encubrirme. Sin embargo, este asunto es un rencor entre yo y Gu Ruoruo. No quiero arrastrarte conmigo. Crecí con esa mujer desde mi juventud. Ella es capaz de hacer cualquier cosa. En el futuro, incluso podría desahogar su frustración en ti. Así que solo sigamos la corriente".

Después de decir eso, Tang Ruochu se puso de pie, se inclinó ante Li Na y luego salió de la oficina.