Resumo do capítulo Capítulo 254 de El romance del dulce remolino: Señor, ¿le gustaría ser mi pareja en el matrimonio?
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Después de que Shen Mofei terminó de hablar, instantáneamente sintió ganas de llorar.
"Bien. Recuerda darme un informe cuando regreses".
¿Todavía necesitaba escribir un informe? Él no solo quería llorar en ese instante, sino que también quería morir.
¿Por qué era tan oprimido por su primo? ¿Por qué? ¿No deberían los hermanos mayores consentir a los hermanos menores?
Justo cuando Shen Mofei se quejaba por dentro, un amable mensaje llegó desde el otro extremo de la línea.
"Cuidaré al Abuelo por ti".
"De acuerdo entonces". Shen Mofei suspiró. Su abuelo solo escuchaba a su primo. Solo podía contar con él para arreglar todo por él.
Por eso siempre admiró y respetó a su primo.
Tan pronto como Lu Shijin se enteró de que Tang Ruochu había sufrido una quemadura, él abandonó su trabajo y se apresuró para regresar a casa de inmediato.
Él abrió la puerta del dormitorio y la vio acostada en la cama.
Él caminó hacia un lado de la cama, bajó la cabeza, y su mirada se fijó en el rostro tranquilo de ella. Un flujo de luz pasó débilmente por sus ojos oscuros.
Su mirada se movió hacia abajo. El cuello de su pijama estaba un poco bajo, así que vio el enrojecimiento de su pecho.
Su corazón se desgarró con dureza y sus cejas afiladas se fruncieron con fuerza. Sus ojos estaban llenos de lástima. Él extendió la mano, queriendo tocarla. Sin embargo, cuando estaba a punto de tocar su piel, sus dedos se cerraron lentamente.
Él tenía miedo de lastimarla.
Tang Ruochu se sentía confusa por el sueño. Ella podía sentir sutilmente que alguien la miraba.
Pero ella estaba en su propia casa, así que ¿cómo podría haber alguien mirándola?
Después de luchar por un tiempo, ella finalmente abrió los ojos lentamente. Una figura familiar apareció frente a ella.
"Shijin". Ella lo dijo directamente sin pensar en quién era.
Al escuchar su voz, Lu Shijin apartó la mirada de su pecho y la miró. Él sonrió suavemente. "Sí, soy yo".
Al ver que todavía no estaba convencido, ella suspiró suavemente y tomó su mano. Ella miró sus ojos profundos y frunció los labios con expresión lastimosa. "Quiero que me cocines una gacha".
Lu Shijin la miró profundamente. Él sabía que ella no quería que él se preocupara demasiado o estuviera demasiado nervioso, así que trató de desviar su atención.
Él agarró su mano con fuerza y luego la soltó. "¿Qué tipo de gacha quieres comer?".
Tang Ruochu sonrió. "Gacha de marisco".
"Espérame". Él acarició su cabello con cariño y luego se volteó para salir de la habitación.
Al ver su parte trasera desaparecer por la puerta, Tang Ruochu suspiró. Entonces, una dulce y alegre sonrisa se extendió por las comisuras de sus labios.
Él había dejado a un lado su trabajo y regresó a ver cómo estaba. Esto mostraba lo preocupado que estaba. Sin embargo, ella no quería afectar su trabajo.
Mientras se mordía los labios, ella tomó una decisión.
Ella tendría una buena conversación con él más tarde durante la comida.
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