El romance del dulce remolino: Señor, ¿le gustaría ser mi pareja en el matrimonio? romance Capítulo 392

Tang Ruochu examinó el informe de ganancias de los últimos años del Grupo Tang de manera seria y enfocada.

En la pantalla de su computadora, el título de un archivo estaba en letras negras y en negrita:

"Las perspectivas de desarrollo del Grupo Tang para la próxima década".

Si quería que los accionistas la respaldaran, tenía que idear algo, por lo que tenía que escribir un informe sobre las perspectivas futuras de la empresa.

Sin embargo, no era una experta en cómo administrar una empresa y los informes de ganancias le daban dolor de cabeza.

Cuando Lu Shijin llegó a casa, la Tía Wu le dijo que su esposa había subido las escaleras tan pronto como había llegado y que no quería que la molestaran.

Pero ya era hora de cenar, y la Tía Wu dudaba si subir y llamarla para cenar.

"La voy a traer". Lu Shijin le sonrió a la Tía Wu y luego subió las escaleras.

Probablemente ella estaría preocupada por la reunión de la junta de accionistas del Grupo Tang que tendría lugar tres días después. Shengyao le había contado todo y él también dijo que podía manejarlo ella misma.

Los labios de Lu Shijin se curvaron en una leve sonrisa. Ella siempre estaba tan desesperadamente confiada, pero luego cada vez la exponían. Realmente no sabía qué hacer con ella.

Él empujó la puerta del estudio para abrirla y la vio sentada frente al escritorio.

Mientras se acercaba a ella, la escuchó murmurar.

"¿Qué diablos es un cambio en el valor razonable? ¿Por qué este informe de ganancias parece tan complicado?".

Ni siquiera se dio cuenta de que alguien había entrado en la habitación, ya que estaba completamente sumergida en el informe que tenía en la mano.

Lu Shijin no pudo evitar sonreír, y golpeó suavemente el escritorio.

Al escuchar el sonido, ella levantó la cabeza y sus ojos se iluminaron en el momento en que lo vio a él.

"Has vuelto, Shijin".

Tang Ruochu curvó los labios y se sintió un poco molesta por sus burlas.

A pesar de notar su molestia, Lu Shijin asintió con indiferencia. "Dije eso, pero hay cosas que simplemente no puedes dominar en el acto".

"Cierto". Tang Ruochu dejó caer sus hombros derrotada. De hecho, era una realidad cruel que no podía negar.

Si un simple informe de ganancias ya la estaba matando, entonces ni siquiera quería imaginarse el resto.

La reunión de la junta se llevaría a cabo en tres días y su futuro parecía tan sombrío.

Sin embargo...

Algo pareció venir a su mente, y su rostro bonito pero sombrío de repente se iluminó. Ella sonrió con picardía y dijo: "¿Pero no te tengo a ti?".

"¿Ah, de verdad?". Lu Shijin volvió a enarcar las cejas. "¿Quieres decir que quieres que te ayude?".