Resumo de Capítulo 399 – Capítulo essencial de El romance del dulce remolino: Señor, ¿le gustaría ser mi pareja en el matrimonio? por Internet
O capítulo Capítulo 399 é um dos momentos mais intensos da obra El romance del dulce remolino: Señor, ¿le gustaría ser mi pareja en el matrimonio?, escrita por Internet. Com elementos marcantes do gênero Romance, esta parte da história revela conflitos profundos, revelações impactantes e mudanças decisivas nos personagens. Uma leitura imperdível para quem acompanha a trama.
Hasta el final de la cena, Tang Ruochu no murmuró ni una sola palabra.
Incluso cuando Lu Shengyao habló con ella, ella simplemente respondía con una palabra, ya que parecía indiferente y desinteresada.
Inicialmente, Lu Shengyao se preguntó qué estaba mal con ella. Solo después de un tiempo fue que él se dio cuenta de que había cometido un error.
Cuando comenzó a burlarse de su Hermano Mayor diciendo que solo necesitaba comer lápiz labial, su cuñada se quedó en silencio.
‘¿Estará avergonzada o enojada?’.
Mientras él hablaba, la miró en secreto. Sin embargo, él se dio cuenta de que ella parecía tranquila y sin emociones.
"Shengyao". Lu Shijin lo llamó.
Al escuchar que él lo llamaba, Lu Shengyao levantó los ojos para mirarlo curiosamente.
Su hermano miró profundamente dentro de su alma y habló con la boca ligeramente abierta. "El anciano te pide que vayas a una cita a ciegas pasado mañana, a las 10:00 a.m. La ubicación será 'Mar de la Galaxia’. Recuerda llegar a tiempo, o...".
Él no terminó su oración a propósito, pero Lu Shengyao sabía, por su mirada profunda, que la consecuencia sería severa si no asistía a la cita a ciegas.
Sin embargo...
"Las citas a ciegas no me gustan; son muy aburridas. Solo las citas románticas me convienen". Lu Shengyao rechazó directamente esta cita a ciegas arreglada.
Mientras Tang Ruochu comía en silencio, levantó sus cejas cuando escuchó que Lu Shengyao estaba a punto de ir a una cita a ciegas. Ella culpó al padre de Shijin por ser demasiado anticuado por obligar siempre a sus hijos a tener citas a ciegas. Además de Shijin, Shengyao tampoco pudo escapar de este método anticuado.
"Ve y habla con el anciano tú mismo. No hay necesidad de hablar conmigo, porque simplemente estoy transmitiendo lo que él dijo". Lu Shijin se retiró por completo de este tema.
Sin embargo, Lu Shengyao sabía que esto era exactamente lo que él quería decir y era algo que acababa de decidir. Su hermano simplemente usó al anciano para encubrir sus intenciones.
¿Pero para qué?
Obviamente fue porque habló descuidadamente y había enfurecido a su cuñada.
Al ver eso, ella se volteó para mirar a Lu Shijin con una expresión de desconcierto. Este último sonrió gentilmente y respondió, "No hay necesidad de prestarle algo de atención. Regresaremos una vez que terminemos nuestra comida".
Tang Ruochu asintió mientras se olvidaba de lo que significaban las palabras de Lu Shengyao.
Al día siguiente, ante la insistencia de Tang Ruochu, Lu Shengyao regresó para visitar al viejo Chen.
Esta vez, no fueron de inmediato a la casa del viejo Chen, sino que caminaron por el área.
"Al viejo Chen le encanta el ajedrez. Por lo general, baja las escaleras después del desayuno para jugar al ajedrez con otras personas mayores que usualmente toma toda la mañana. Por eso, podemos saber que está obsesionado con el juego".
Esa fue una información que Lu Shengyao había obtenido de otras personas mayores.
Inclinando la cabeza hacia los lados, Tang Ruochu le preguntó, "¿Sabes cómo jugar al ajedrez?".
"Por supuesto", respondió Lu Shengyao sin dudarlo.
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