El romance del dulce remolino: Señor, ¿le gustaría ser mi pareja en el matrimonio? romance Capítulo 511

"Chuchu, no te enojes. Yo cambiaré". Esta era probablemente la primera vez que Ji Yinfeng le hablaba con tanta humildad.

En el pasado, ella siempre había sido su seguidora, casi completamente obediente a todos los caprichos y palabras de él. Ella lo consideraba totalmente como el centro de su vida.

Esto se debía a que ella pensaba que él la había amado en ese entonces.

Pero al final, todo resultó ser una broma.

Cuando ella pensaba en esto, los ojos de Tang Ruochu se volvieron cada vez más fríos.

Tang Ruochu sabía muy bien por qué Ji Yinfeng estaba aquí. ¿No era porque ahora ella era la presidenta del Grupo Tang?

¿Tratando de recuperar su corazón? ¡Él simplemente no podía renunciar al Grupo Tang!

"Ji Yinfeng, ¿estás tratando sinceramente de recuperar mi corazón?". Tang Ruochu lo miró fijamente.

"Por supuesto que sí". Ji Yinfeng casi lo dijo bruscamente, sin dudar en lo más mínimo.

Tang Ruochu levantó sus cejas. "Entonces tienes que comprobármelo".

"¿Cómo?".

"¿Cómo?". Una sonrisa extraña apareció en las comisuras de los labios de Tang Ruochu.

Ji Yinfeng inmediatamente tuvo un mal presentimiento.

Efectivamente, él la escuchó decir lentamente: "Si saltas por ese puente que cruza el río, me creeré tu sinceridad".

"¿Saltar del puente que cruza el río?". La tez facial de Ji Yinfeng se puso pálido de repente.

Cuando ella vio que el rostro de él se ponía pálido, Tang Ruochu sonrió un poco. "¿Por qué? ¿No te atreves?".

Ji Yinfeng no respondió, simplemente la miró fijamente.

Tang Ruochu retrajo su sonrisa y pronunció fríamente y claramente, palabra por palabra. "Si no te atreves, no te presentes ante mí. Ya no tenemos nada que ver el uno con el otro. Será mejor que dejes de perturbar mi vida".

Después de decir esto, ella ya no lo miró. Ella pasó junto a él y se fue sin mirar hacia atrás.

En este momento, se escuchó una voz fuerte y áspera.

"¡Ji Yinfeng! ¿Qué estás haciendo?".

Tang Ruochu y Ji Yinfeng voltearon sus cabezas simultáneamente en la dirección de esa voz. Ellos vieron a Lu Shengyao yendo enfadadamente hacia ellos.

"Shengyao...". En el instante en que vio a Shengyao, Tang Ruochu exhaló un gran suspiro de alivio. Ella sabía que estaba salvada.

Lu Shengyao no había esperado esta escena exasperante en el momento en que salió por la puerta. Él ni siquiera se atrevió a imaginar lo que le habría sucedido a su cuñada si hubiera llegado tarde. ¿Se la habría llevado Ji Yinfeng?

Él corrió y golpeó a Ji Yinfeng en la cara antes de que este último pudiera reaccionar.

Ji Yinfeng fue tomado desprevenido que no tuvo más remedio que liberar a Tang Ruochu, dando unos pasos hacia atrás.

"Cuñada, ¿estás bien?". Lu Shengyao arrastró a Tang Ruochu detrás de él y preguntó ansiosamente.

"Estoy bien". Tang Ruochu sacudió su cabeza ligeramente.