El romance del dulce remolino: Señor, ¿le gustaría ser mi pareja en el matrimonio? romance Capítulo 756

Lu Dingbang estaba sentado en la sala de estar, con una expresión seria y fría mientras veía entrar a su tercer hijo.

"Papá", Lu Shengyao lo saludó.

Lu Dingbang entrecerró sus ojos un poco y dijo bruscamente: "¿Por qué has regresado?".

Al escuchar la pregunta de él, una sonrisa apareció en el rostro de Lu Shengyao. "Papá, probablemente sabes mejor por qué estoy aquí, ¿no? ¿Por qué molestarte en preguntarme?".

Lu Dingbang lo miró profundamente antes de apartar su mirada.

Lu Shengyao se había acostumbrado durante mucho tiempo a su actitud fría, por lo que él simplemente se sentó solo y no tenía prisa en hablar.

El aire estaba quieto y las personas que no sabían hubieran pensado que ellos eran extraños que no sabían qué decirse uno al otro. En verdad, ellos eran padre e hijo, pero eran un dúo que se parecía más a extraños. Después de un largo tiempo, Lu Dingbang habló primero. "Si has regresado por la familia Ying, simplemente eres demasiado ingenuo, Shengyao".

Lu Shengyao sonrió. "Ya que me atreví a regresar, no hay nada que temer".

Había silencio de nuevo.

Después de que pasó un tiempo, era el turno de Lu Shengyao de romper el silencio.

"Papá, ¿puedes dejar ir a la Familia Ying?".

"¿Por qué?". La intensa mirada de Lu Dingbang cayó sobre su rostro. "¿Por qué yo debería dejar ir a la Familia Ying?".

"El hecho de que soy el hermano menor del Hermano Mayor”.

Un destello apareció inmediatamente en los ojos de Lu Dingbang como respuesta, y preguntó: "¿Sabes que tienes un precio que pagarme para que deje ir a la Familia Ying?".

Lu Shengyao asintió con su cabeza. "Lo sé. Es porque sé que estoy aquí".

Su expresión era tranquila sin rastro de emoción.

Parecía que era tal como él había dicho; él ya conocía las consecuencias desde mucho antes.

Lu Dingbang tenía una expresión que mostraba que él se lo había esperado por completo, y había una mirada triunfante en sus ojos. "Si hubieras regresado antes, las cosas no se habrían intensificado".

‘Xiaoxiao, si puedo protegerte, sacrificarme vale más que la pena’.

Mientras él estaba sumido en sus pensamientos, el timbre de la puerta sonó de repente.

Él abrió sus ojos y se volteó hacia el pasillo. Frunciendo el ceño, él se levantó y fue a abrir la puerta.

Tan pronto cuando se abrió la puerta, se escuchó un grito. "¡Shengyao, feliz cumpleaños!".

¿Feliz?

¿Cumpleaños?

Lu Shengyao estaba atónito. Atónito, él miró a Xu Xinlei, quien estaba en la puerta, pero pronto se dio cuenta de lo que estaba pasando. "Lo siento, hoy no es mi cumpleaños", le dijo a la visitante en un tono educado pero distante.

"¿No lo es?". Xu Xinlei abrió los ojos con sorpresa.

No, ella había visto su tarjeta de identificación anteriormente. De hecho, el cumpleaños de él era hoy.