El Yerno Millonario romance Capítulo 234

Todo esto parecía una coincidencia, pero ¿Cómo podría haber tal coincidencia?

Peter tenía la vaga sensación de que todo esto estaba definitivamente relacionado con Charlie. Por lo tanto, sólo podía arrodillarse frente a Charlie porque ya no le importaba su propia reputación.

Claire no sabía lo que la otra parte le había dicho a Peter por teléfono. Por lo tanto, sólo podía decir sorprendida: "Peter, ¿no va bien tu empresa? ¿De qué estás hablando? Además de eso, aunque te enfrentes a la bancarrota, ¿Qué tiene que ver con Charlie?".

Peter se arrodilló en el suelo mientras decía: "Claire, ¡siento mucho haberte ofendido hace un rato! Admito mi error y te pido perdón. Mi compañía me llamó antes para decirme que uno de mis mayores clientes había llamado para terminar su contrato con nosotros. Además, todos los bancos acaban de llamar para recoger el dinero que les he pedido prestado. Ya estoy acabado esta vez... por favor, ayúdeme a hablar bien de mí ante el Sr. Wade. De lo contrario, ya no hay forma de sobrevivir en este mundo”.

Claire se sorprendió mucho en ese momento y simplemente respondió: "Creo que te has equivocado, Peter. No creo que Charlie tenga tanto poder".

Charlie también respondió vagamente: "Peter, todo en este mundo tiene su causa y su efecto. Es inútil que me pidas ayuda. Deberías reflexionar sobre ti mismo".

Después de eso, Charlie llevó a Claire al coche antes de que él entrara.

Después de que Charlie se alejara, Peter seguía arrodillado a un lado de la carretera con una expresión en blanco en su cara.

Una gran multitud de personas ya se había reunido a su alrededor mientras lo miraban sorprendidos. En ese momento, la multitud de gente no podía evitar susurrar entre ellos.

Sin embargo, Peter no pudo soportarlo más.

Aunque hoy era una persona muy exitosa y respetada, mañana se convertiría en un mendigo en las calles.

No, ni siquiera sería un mendigo.

No tenía nada de dinero y le debía a la gente más de cientos de millones de dólares en daños y perjuicios.

En ese momento, el celular de Peter comenzó a sonar de nuevo y la voz nerviosa de su asistente sonó al otro lado de la línea.

"Sr. Murray, la compañía de usura ha llamado para decirnos que su tasa de interés se multiplicará por diez y que recogerán su dinero mañana. Si no tiene el dinero para pagarles, dijeron que le cortaran la mano derecha...".

"Sr. Murray, el propietario del edificio de oficinas que estamos alquilando también ha llamado para informar que el alquiler se incrementará veinte veces y si nos negamos a aceptar esa tarifa de alquiler, ¡tendremos que mudarnos mañana!".

"Sr. Murray...".

Peter dejó caer su celular al suelo y se arrodilló con una expresión sombría en su rostro.

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