El Yerno Millonario romance Capítulo 431

Mientras Charlie, su esposa y Loreen se bañaban en la piscina de aguas termales, Marcus, a quien le habían grabado las palabras 'patético idiota' en su frente, y su novia de plástico, que ahora tenía la nariz torcida, habían conseguido un aventón en una camioneta destartalada de regreso a la ciudad.

En ese momento, Marcus, que estaba sentado dentro de la camioneta, mantuvo su frente ensangrentada cubierta por temor a que el conductor de la camioneta viera las palabras grabadas en su frente.

Ambos habían detenido la furgoneta al salir del Balneario Campeones Elys. Habían negociado con el conductor de la furgoneta y llegado a un acuerdo de que el conductor de la furgoneta los llevaría a los dos a casa por doscientos dólares. En ese momento, todo lo que Marcus quería era llegar a casa lo antes posible. ¡No quería más problemas!

Sin embargo, el conductor de la camioneta podía ver la sangre que manaba de la frente de Marcus por el espejo retrovisor.

Después de observarlo durante mucho tiempo, no pudo evitar preguntar sorprendido: “Joven, ¿estás herido?”.

Marcus respondió enojado: “¡Esto no tiene nada que ver contigo! ¡Solo sigue conduciendo de forma segura y deja de preguntarme tantas tonterías!”.

El conductor se sintió un poco descontento por esto y dijo: “¡¿De verdad crees que estoy preocupado por ti?! ¡Solo te lo pregunto porque parece que tu frente sangra continuamente! ¡No quiero que manches mis asientos con tu sangre!”.

Tan pronto como Marcus escuchó las palabras del conductor, explotó de inmediato: “¡Maldita sea, patético idiota! ¡Tú camioneta vale solo entre cuarenta y cincuenta mil dólares como máximo! ¿De verdad tienes miedo de que ensucie tu patética furgoneta? ¡Eres ridículo!”.

Marcus ya estaba acostumbrado a usar su eslogan, 'patético idiota', y parecía que no sería capaz de dejar este hábito incluso si tuviera las palabras 'patético idiota' grabadas en su frente. Esta era la razón por la que se sabía comúnmente que sería fácil reformar un país, ¡pero sería casi imposible cambiar la naturaleza humana!

El conductor de la camioneta nunca esperó ser reprendido por una persona a la que le estaba dando el aventón en su camioneta. Por lo tanto, perdió los estribos y soltó de inmediato: “¡¿Eres realmente un maleducado?! ¿Cómo puedes usar un lenguaje tan grosero?”.

Marcus estaba tan molesto en ese momento que sintió como si quisiera morir. Cuando vio la expresión de enojo en el rostro del conductor de la camioneta, estalló imprudentemente: “¡Mierda! ¿No admites que eres un patético idiota? ¿Quién mierda te crees que eres para hablar conmigo de esa manera? ¿Crees que puedo conseguir que alguien te quite la patética vida con solo una llamada telefónica? ¡Nadie preguntaría por un patético idiota como tú incluso si fueras a morir hoy!”.

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