Lin Xinyan se calmó a sí misma.
-Señor, podría regresar por favor, creo que olvidé algo en la empresa. -El taxista pretendió no haber escuchado nada, así que ella levantó la voz y dijo—: ¡Por favor, detenga el auto!
El taxista aceleró y en lugar del tono gentil que usó antes, ahora sonaba mucho más frío.
—Aún no hemos llegado.
En ese momento, Lin Xinyan sintió que su respiración se aceleraba. Su mente le decía que no entrara en pánico ahora y movió rápido su mano en un intento por sacar su teléfono para pedir ayuda, pero el conductor vio sus intenciones y pisó los frenos. Sin previo aviso, el teléfono de Lin Xinyan cayó de su mano.
—¿Quién... quién eres? ¿Qué es lo que quieres? —Lin Xinyan se obligó a reprimir el pánico y terror que sentía para calmarse.
El conductor pisó el acelerador y la miró a través del espejo retrovisor.
-¿Hizo enojar a alguien, señorita? Yo solo hago lo que me pidieron.
Ella sentía que el corazón se le salía y sus manos temblaban. ¿Quién quería hacerle daño? ¿Bai Zhuwei?
—¡Puedo pagarte! —Lin Xinyan trató de negociar con él.
El taxista la miró. Ella vestía con ropa barata, misma que no usaría la gente rica, así que no creía en sus palabras.
El lugar parecía cada vez más remoto y el corazón de Lin Xinyan se endureció. Si ella saltara fuera del auto, tal vez tendría oportunidad de vivir, pero si continuaba dentro no podría imaginarse las consecuencias. Apretó sus manos y por fin tomó una decisión, abrió el seguro del auto y empujó la puerta.
Mientras tanto, el conductor la miró.
—Incluso si no te mueres al saltar, tu cuerpo se desangrará por las heridas. ¡No puedes escapar!
Aun si no podía hacerlo, ella no seguiría dentro del auto con aquel conductor ya que eso sería un desastre. Ella estaba asustada, pero no tenía otra opción.
-Bebé, por favor se fuerte -dijo tras acariciar su vientre.
El feroz viento silbaba y enredaba su cabello, pero ella estaba determinada y reunió todo su coraje para saltar. El auto había estado acelerando, así que cuando saltó, sus rodillas fueron las primeras en impactar contra el suelo y se tumbó sobre el pavimento. Al instante, un dolor intenso invadió sus rodillas y la sangre comenzó a brotar en sincronía con las olas de dolor.
Sin embargo, ella no tuvo tiempo de mirar, solo se levantó y comenzó a correr. El taxista nunca pensó que ella tendría el valor para saltar, así que detuvo el auto y comenzó a perseguirla. Lin Xinyan cojeaba así que no podía correr rápido. Cada vez que levantaba las piernas podía sentir un inmenso dolor, pero ella perseveró porque sabía que una vez que se detuviera, estaría condenada.
-¡Alto ahí!
En un parpadeo, el taxista parecía que iba atraparla y ella solo pudo correr con desesperación. Y así lo hizo. Había algunas luces cerca en el bosque, quizás había alguien ahí. Ella solo podía pedir ayuda, ya que no podía escapar por su cuenta, entonces se adentró en el bosque hacia las luces gritando y pidiendo ayuda mientras corría, esperando atraer la atención de alguna persona.
El conductor era fuerte y Un Xinyan estaba herida y debido a eso, logró atraparla.
-¡No pienses en escapar!
Él la arrastró hasta la carretera y trato de meterla dentro del auto; sin embargo, ella se dio la vuelta y le mordió el brazo. El taxista gritó y la abofeteó.
-Maldita p****, ¿cómo te atreves a morderme?
Lin Xinyan se aferró mientras su boca se llenó con un metálico sabor a sangre. Él la liberó al sentir el dolor, mientras que ella luchaba. Esta vez, ella corrió aún más
rápido.
—¡Quédate ahí!
Él continuó persiguiéndola, pero tropezó y eso le dio más tiempo para escapar; solo cuando estuvo cerca de las luces se dio cuenta que estaban en una villa y golpeó la puerta con fuerza.
-¿Hay alguien adentro? ¡Ayúdenme!
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