Narra Arvan.
Hoy regresé a la universidad. Tuve que abandonarla porque resulté herido en la última guerra. Muchos lobos luchadores murieron en la guerra. No pude salvarlos. Mi padre casi muere, pero su gamma lo salvó. Su gamma era uno de sus amigos cercanos. Al final del día, un amigo salvó la vida de otro amigo.
Liam, mi beta, me llamó y me preguntó dónde estaba. Le hablé sobre la entrada y mis amigos vinieron a recogerme.
Las chicas estaban gritando y vociferando al verme. No entendía a esas chicas. ¿Qué había de tan emocionante?
—Bienvenido de vuelta —dijeron Liam y Vector.
Vector era mi Theta.
—Te extrañamos, amigo —djeron Henry y Jack.
Henry era mi Delta y Jack era mi Gamma.
Todos eran lobos poderosos.
—Sí. Ahora no te comportes como si no nos viéramos todos los días —mencionó levantando las cejas.
—Oh sí, olvidé que nos vemos y trabajamos juntos todos los días, Alfa —habló Liam y todos nos reímos.
—Vamos a clase —dijo Vector y asentimos y nos fuimos a nuestra clase.
Después de la clase, fuimos a la cafetería a comer algo. Cuando llegamos allí, las chicas empezaron a gritar de nuevo y los chicos parecían asustados.
Realmente no entendía a esas chicas. Primero, sus padres querían llamar mi atención, y ahora sus hijas. Qué bien.
De repente, sentí un aroma profundo y mezclado de rosa y lavanda. ¿Qué olor era ese? Era tan profundo que casi perdí la cordura.
En medio de la multitud de chicas, quería encontrar al dueño del aroma.
—Vamos a sentarnos en nuestra mesa —habló Liam y comenzamos a caminar.
Ese aroma se acercaba cada vez más. Dejé de caminar y miré a todas partes en busca de la persona.
Y luego mis ojos se detuvieron en otro par de ojos. Mi lobo gruñó y dijo:
—¡Mate!
Después de escuchar lo que dijo mi lobo, entrecerré los ojos hacia ella.
Porque me di cuenta de que era una omega. ¿Cómo podía ser una omega mi compañera?
Aparté la mirada de sus ojos y volví con mis amigos.
Podía sentirla, cómo hablaba con su amiga y me miraba.
«¿Tan interesada en mí, eh?», pensé.
Después de todas las clases, fui al estacionamiento. Estaba apoyado en mi coche y hablando con mis amigos cuando vi que esa chica venía con su amiga allí.
No me gustaba la idea, pero no podía decirle nada a mi padre.
Llegué a casa tarde esa noche porque sabía que pronto se revelaría nuestro vínculo. Ella se enteraría de mí. Y no quería ese drama. Así que fui allí tarde con Liam.
Liam sabía todo sobre mí porque era mi mejor amigo, le conté todo. Trató de hacerme entender el vínculo de pareja porque él ya tenía a su mate.
Y yo soy el alfa principal de la manada de sangre Crismon, no podía rechazar a mi mate. Pero no quería escuchar esas excusas. Ya tenía a Lina. Ella podría ser una Luna perfecta y poderosa para mí y mi manada. Ella era mi novia por una razón. Rechazó a un alfa principal y soportó todo el dolor por mí. Tenía tanto poder. Ella sería mi Luna, ya estaba decidido.
Cuando me acerqué a mi casa de la manada, olí el aroma de rosa y lavanda.
Allí estaba ella, parada en la entrada. Vi su espalda. Llevaba un largo vestido blanco.
Tenía una buena figura. Pero no tenía un buen rango.
Me acerqué a ella y me puse justo detrás de ella. Ella sintió a alguien detrás de ella, así que se dio la vuelta y me miró.
Mi lobo gruñó dentro de mí.
—Mía.
Estaba tratando de apoderarse de mí. Mis ojos brillaban en rojo.
Ella estaba sorprendida mientras me miraba a los ojos y susurró:
—¿Mate?

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